Según las fuentes, cuando los estudiantes se lo contaron a sus padres, estos se dirigieron inmediatamente al director del colegio.
El profesor asumió su error y explicó que estaba experimentando con el dicho "Tote ke samaan ratne" (aprender de memoria como un loro). Según afirma, le pareció que, dado que los loros son muy aficionados al chile, administrar una dosis de agua con chile a los estudiantes mejoraría su capacidad de aprendizaje.