La situación de los productores de manzanas polacos, así como las empresas exportadoras del país no es difícil en estos momentos. El cierre de la frontera con Rusia hace unos años les ha puesto en una situación delicada en cuanto a los estándares de esta fruta se refiere. Hasta el momento, los productores polacos destinaban las manzanas Royal Gala, de mejor calidad, a países como Reino Unido o Francia, siendo Rusia un mercado que aceptaba todo el resto de producción sin demasiadas exigencias. Es por ello que ahora, que deben medirse con competidores europeos, las pocas exigencias aplicadas en el pasado empiezan a pasar factura. “Nosotros estamos trabajando duro, aprendiendo cada día e intentando alcanzar los estándares europeos para poder ser más competitivos en el mercado”, afirma Monica Cłapa, responsable comercial en Perfect Fruits sp.zo.o.
Por el momento, su mercado en Bielorrusia les está ayudando a sacar adelante la mayor parte de la producción, sobre un 60%, desde donde pretenden introducir la mercancía en Rusia. “Sabemos que hay carencia de ciertos alimentos, sabemos que necesitan las manzanas”, indica Cłapa. Por otra parte, entre sus próximas metas, además de cumplir a rajatabla los estándares fitosanitarios exigidos en Europa occidental, pretenden hacerse un hueco en el mercado Escandinavo.
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Monika Cłapa
Perfect Fruits sp.zo.o
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