"En los últimos años, hemos observado que la producción y el consumo se han incrementado al mismo tiempo", asegura Yaniv Cohen, de Hadiklaim, la mayor comercializadora de Israel de dátiles Medjoul. Como resultado de ese incremento del consumo, el mercado se está desequilibrando un poco. "No hay suficiente oferta mundial de dátiles para seguir satisfaciendo la demanda". Israel es el líder indiscutible de mercado para los dátiles Medjoul, con un volumen de producción de 30.000 toneladas, la mitad del volumen producido en todo el mundo. Las 30.000 toneladas restantes están en manos, principalmente, de productores americanos, con 15.000 toneladas, mientras que el otro 25% se cultiva en países como Jordania, Sudáfrica, Namibia y Marruecos.
Yaniv Cohen, de Hadiklaim.
Dátiles congelados
"El valle del Jordán tiene un clima único y por ello produce la mejor calidad", explica Cohen. En 1982, se fundó Hadiklaim para comercializar dátiles Medjoul y, en la actualidad, la empresa posee 16 centrales de envasado en el valle del Jordán. La temporada va de agosto a octubre, tras lo cual se venden los dátiles almacenados. "Con temperaturas de 18 grados centígrados bajo cero, los dátiles tienen una larga vida útil", añade. La fruta no se congela gracias a sus altos niveles de azúcar. "La estructura de los dátiles no se modifica en los congeladores".
Por ahora, el surtido está formado por 9 variedades diferentes de dátiles y 22.000 productos. La empresa exporta a 35 países y tiene en torno a 70 compradores en el mercado nacional. "Somos una empresa cultivadora, por lo que nuestro trabajo es lograr buenos resultados". La mayor porción de las ventas, el 70%, corresponde a los dátiles Medjoul. "Los dátiles son únicos; en realidad no son una fruta, sino un fruto deshidratado".
Mercado europeo
Los dátiles se dividen en tres categorías principales. La categoría premium se destina a la exportación y al segmento de alta gama en Israel. La segunda categoría se destina a otros mercados. Los dátiles que no se incluyen en estas categorías se convierten en jarabe, miel o licor, entre otras cosas. "La Medjoul es la mejor variedad y los productos que se elaboran con los dátiles son cien por cien naturales". El estatus real de los dátiles queda realzado por su nombre comercial: King Solomon.
Dentro de Europa, Países Bajos, Francia, Alemania y el Reino Unido son los países de venta más importantes. La exportadora suministra los dátiles a prácticamente todas las principales cadenas de supermercados británicas. Fuera de Europa, Turquía, Rusia, Estados Unidos, Canadá, Australia y Extremo Oriente son grandes mercados. Aunque el consumo está creciendo, los dátiles prémium todavía son relativamente desconocidos en mercados como Europa occidental. "Los dátiles siguen considerándose un producto étnico, pero cada vez son más habituales", apunta Cohen. "Lo hemos observado en el mercado británico".
Producto étnico e impulso de la salud
El auge de los dátiles está motivado por dos factores, según Cohen. En primer lugar, el mercado está creciendo por la inmigración en Europa. Estos inmigrantes conocen los dátiles y los buscan en los supermercados. En segundo lugar, los dátiles sacan partido del impulso que se le está dando a la salud. Además de todas las propiedades saludables de este producto, los dátiles son fáciles de transportar. Hadiklaim se anticipa a esta tendencia adaptando los envases. "Tenemos un envase de 5 kilos y uno con 2 únicos dátiles", ilustra Cohen la amplitud de la oferta.
Desde hace ya algunos años, la empresa también estudia nuevos mercados, como la India y China en Extremo Oriente, y América Latina. "También queremos comercializar dátiles allí". Aunque en China hay dátiles, el perfil del consumidor es muy distinto, pues la mayoría de los consumidores chinos no están acostumbrados al sabor dulce de la fruta. "Sin embargo, tan solo con que una parte de los 1.200 millones de chinos coman dátiles, el mercado será grande".
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