"Por ahora, todo bien", comenta Yavuz Taner, de Alanar, acerca de la temporada de cerezas de Turquía, que comenzará a finales de mayo y que se presenta muy prometedora. Este invierno hizo el frío suficiente para que las frutas se desarrollaran correctamente y, dado que los productores no se verán sorprendidos por las heladas primaverales de los próximos dos meses, el volumen y la calidad deberían ser excelentes.
El año pasado, hubo escasez de cerezas, por lo que los productores turcos se beneficiaron de un aumento de los precios. Alanar exportó un volumen de 4.000 toneladas, y calcula que esa cifra aumentará entre un 25% y un 30% este año. Uno de los principales catalizadores de este aumento es el mercado de Oriente.
"Hace diez días, visité Hong Kong, donde estuve forjando contactos nuevos en el sector chino de los supermercados, de modo que dispondremos de más oportunidades comerciales", explica Taner.
Debido a las tensiones políticas entre Turquía y Rusia, el año pasado se exportaron menos cerezas a Rusia, pero Taner cree que las exportaciones podrían volver a aumentar fácilmente si ambos países logran mejorar sus relaciones políticas.
"Actualmente, estamos invirtiendo en infraestructuras y maquinaria nuevas, como calibradoras y clasificadoras. Aunque todavía no sabemos los precios que van a tener nuestros competidores, hemos mejorado mucho nuestra presentación para los mercados de Europa y Extremo Oriente en comparación con el año pasado", asegura.
Higos negros
Por otra parte, en los últimos años, los productores de higos negros han gozado de condiciones meteorológicas favorables, y, de hecho, Taner opina que puede que hayan sido "demasiado" favorables. "Si hay tanto volumen al comienzo de la temporada, el sector no siempre está preparado para absorber el exceso", argumenta.
Sin embargo, Taner pronostica una temporada muy positiva. "Ahora mismo no hay muchos productores en activo, pero los pocos que hay están haciendo un buen trabajo. En las regiones tempranas hay poco volumen, lo que es bueno de cara a los mercados de Extremo Oriente, porque normalmente hay demasiadas regiones de cultivo".
Alanar ha invertido en varias empresas productoras de la región de Aydin, en Turquía, famosa por sus higos deshidratados. La producción de esta región se destinará principalmente a Extremo Oriente, aunque también se enviará una parte a Europa y Reino Unido.
"Con todos los productos con los que estamos trabajando, tendremos más oportunidades en lo referente al volumen y a la calidad, y esperamos que nuestras exportaciones aumenten un 40%. Antaño, invertimos en 400 hectáreas en distintas regiones y, a medida que los árboles maduran, están empezando a producir más volumen. Este año, por el contrario, vamos a invertir en nuevos métodos de envasado", afirma.
Alanar trata de proporcionar un paquete completo. Además de cerezas e higos negros, el productor y exportador ofrece algunas variedades patentadas de albaricoque, cuya temporada comenzará la primera semana de mayo. "Nuestros albaricoques son muy delicados. Son pequeños, de color más oscuro que las otras variedades y muy dulces, una característica que tiene mucha demanda entre los consumidores asiáticos", concluye Taner.
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