Foto de archivo
Las altas temperaturas, como los más de 25 ºC registrados el 11 de abril, suponen que haya que regar los cultivos cada dos días, porque no ha llovido en meses. "Utilizo mangueras para evitar desperdiciar y para regar bien todas las plantas. De esta forma, la calidad es muy buena".
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Los precios también son buenos. El mes más crítico es mayo, porque hay mucho producto disponible. Argentati destina su volumen a un mayorista y el precio medio son 2 euros el kilo. Las cantidades previstas son las habituales, es decir, unas 8 toneladas por hectárea. La cosecha se destina al mercado hortofrutícola en fresco hasta últimos de mayo, tras lo cual se envía a la industria para producir puntas de espárragos en aceite.
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Otro productor de la zona de Tarquinia también se muestra satisfecho. "Los precios son buenos, así como la calidad y la cantidad. De hecho, son algo más bajos que el año pasado, pero no hay problemas de mercado. No obstante, todavía no hemos alcanzado la plena producción".
La cosecha en el norte de Italia acaba de comenzar, pero con las altas temperaturas de los últimos días, los tallos han madurado deprisa.