Foto: Rosselkhoznadzor
En junio, 17 lotes de frutas y verduras fueron destruidos en la región de Pskov, al noreste del país, en la frontera de los Países Bálticos. Se trata de 212.2 toneladas de manzanas, peras y champiñones de Polonia y los Países Bajos.
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Hacia el noroeste, las autoridades interceptaron más de 81 toneladas de manzanas polacas. La mayoría de la fruta fue interceptada al comienzo del mes durante un seguimiento de la importación de Bielorrusia. Las manzanas fueron desechadas en Sebezh.
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Al sureste, en Kurgán, cerca de Kazajstán, se incautó más de una tonelada y media de manzanas polacas, entre otros. Aunque los contrabandistas habían intentado destruir las etiquetas de las cajas, la inspección pudo determinar el país de origen a través de la información sobre el palé. Los productos también fueron destruidos.
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En Perm, una ciudad al norte, se detuvo un camión con 20 toneladas de col de Kazajstán. Los documentos adjuntos estaban caducados, así que fue castigado con multas y el lote de col fue llevado de vuelta a Kazajstán.
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