Esta semana, se ha publicado la nueva legislación sobre OMG. Esto significa que las organizaciones de productores pueden trabajar en sus programas operativos y diversos planes anuales. El año pasado lograron recibir casi 40 millones de euros de este modo. Este año serán un poco menos, pues Van Nature, Veiling Zaltbommel y Coforta han decidido no solicitar la subvención porque las normas parecen complicadas y poco claras.
Miedo
"Y os preguntáis por qué", pensarán algunos productores. El de los OMG se ha convertido en un tema tabú y a quien se le ocurre sacar el tema pronto se queda solo. También hay muchas quejas sobre las regulaciones, que cada vez son más complejas y difíciles. "Yo lo entiendo. Es difícil, pero para recibir la subvención de energías renovables también hay que cumplir muchos requisitos, aunque en este caso participamos en masa con proyectos geotérmicos. Es hora de abrir los ojos al mundo real. Renunciar a una cantidad así es una pena. Es espacio financiero al que podemos dar un buen uso como sector. Y cuando los productores españoles y belgas lo aprovechan, se crea desigualdad en el mercado", explica Ruud.
Colaboración
En opinión de Ruud, la colaboración no solo es necesaria para solicitar la subvención para OMG, sino que también es una parte importante del futuro del a horticultura. "En general, todos los productores son pymes. Las mayores organizaciones de ventas de los Países Bajos no tienen una facturación de mil millones de euros. Las ventas avanzan cada vez más hacia el retail, jugadores con una facturación de decenas de miles de millones. Y fijémonos en la adquisición de Amazon: debido al aumento de la escala y a las agrupaciones, estos jugadores son cada vez mayores", añade. "Todo el mundo sabe que es en el retail donde se consiguen los márgenes más altos en frutas y hortalizas". La horticultura no puede hacer mucho contra este tipo de actores. Nos permitimos que nos acorralen y no nos damos cuenta del margen que necesitamos para el sector. Y si la parte de los productores se mantiene pequeña, la posición en el mercado sigue siendo inestable".
En algunos canales, los Países Bajos son claramente dominantes, al parecer de Ruud. "Somos uno de los pocos países que suministran tomates en rama de calidad a la gran distribución durante todo el año, algo que otros pueden cumplir solo en parte. Tenemos empresas que funcionan realmente bien. Suministramos un producto superior, pero no dominamos el sector. El mercado de las hortalizas de invernadero es un mercado europeo, y los Países Bajos ni tan siquiera producen el 10% de Europa, así que no intentemos ponernos un traje que nos va grande".