Los datos son importantes para saber el estado del producto

Los tiempos en los que el importador europeo espera que el contenedor de plátanos, cargado en Ecuador, efectúe su llegada para ver el estado de la carga, forman parte del pasado. Ahora los datos juegan un papel muy importante. Fyffes ha utilizado el flujo de datos en sus propios barcos convencionales durante un tiempo, y ahora que la empresa ha confiado su transporte a Maersk Line, reciben sus datos a través de la compañía naviera danesa.

La semana pasada Maersk presentó una plataforma en la que los datos de los contenedores están disponibles para los clientes. Jeronimo Poggio, director de expediciones de Fyffes, habla de la fase de pruebas en la que trabajaron con Remote Container Management (RCM). Cuenta que han estado recibiendo información a través de la plataforma durante un año, tenían actualizaciones sobre la temperatura durante el transporte de sus propios barcos.

Continúa explicando que esos datos son importantes porque quieren saber cómo está el producto antes de que llegue, para evitar sorpresas al abrir el contenedor. Con esa información Fyffes sabe que los plátanos no van a llegar maduros, y que van a ofrecer un buen producto al cliente. Para Maersk es una ventaja porque un defecto en el equipo se descubre rápidamente, si la temperatura cambia, se envía una alarma al cliente y a la compañía naviera.

Se reciben todos los datos en vivo. Los contenedores enviados para Fyffes proporcionan información sobre la temperatura diariamente. Produce una gran cantidad de datos, pero esto no es nuevo para la empresa, que recibe muchos datos al día, incluyendo los datos de sus buques. En el caso de los buques convencionales, suelen gestionar 180 contenedores frigoríficos. 

Durante la fase de prueba, los datos aún no estaban disponibles a través del tablero de mandos como Maersk lo presentó. Comenzaron viendo si funcionaba la recolección de datos. Jerónimo explica, que lo principal para ellos era saber si el envío estaba llegando bien, y esa información les es proporcionada. Un contenedor roto se descubre a tiempo y puede ser reparado, o Fyffes sabe con antelación que parte del envío se perderá debido a la avería. El importador también sabe cuánto tiempo ha estado apagado el frigorífico antes de que el contenedor fuera reparado, para poder vender primero ese lote. Un contenedor roto no tiene porqué significar que la carga se ha perdido, pero al vender el producto rápidamente, pueden evitarse las quejas.