“En los tiempos en los que no existían frigoríficos ni explotaciones a gran escala como en Murcia o Almería, nuestros antepasados, después de recolectar los tomates en el campo, los cosían en una cuerda y los colgaban en el desván de la casa para que tuvieran mejor ventilación y que aguantaran más tiempo. De esta forma, en invierno disponían también de tomate, que llevaban consigo a los campos donde trabajaban, para untarlo en el pan duro, ya que se elaboraba una vez a la semana”, cuenta Esteban Tomás Pérez, gerente de la empresa Más dels Fumeros, en Castellón.
El tomate de colgar no es el típico tomate que puede encontrarse en todas las cadenas de supermercados. Estos tomates se cultivan siguiendo los métodos tradicionales, entutorado en cañas al aire libre, como se hacía antiguamente. Son perfectos para el tradicional desayuno o almuerzo catalán, el “pa amb tomàquet”, es decir, pan con tomate restregado, aceite de oliva, sal, ajo y jamón. Son tomates con muy poca piel, mucho jugo y una larga vida útil, ya que puede aguantar más de tres meses en perfectas condiciones sin necesidad de frigorífico. Además, también se usan mucho en los sofritos para la elaboración de paella y guisos tradicionales.
“Somos una empresa familiar de tres generaciones y queremos darle valor sin perder nuestras raíces. Por eso, no damos tanta prioridad a la apariencia del tomate, sino a mantener el aroma, el sabor y la jugosidad del tomate de toda la vida. Las variedades que empleamos son autóctonas, no pasan por el laboratorio para hibridaciones ni procesos de selección genética. Hacemos siempre una selección de la semilla en campo comprobando cuáles son las mejores plantas y tomates”, explica Esteban Tomás.
La empresa castellonense distribuye los tomates principalmente en España, sobretodo en Castellón, Cataluña y Baleares, así como también en Andorra y en el sur de Francia, donde su gastronomía comparte muchas similitudes con la cocina castellonense y catalana.
“Hemos enviado tomate a países como Reino Unido y Suiza, pero en estos destinos es complicado suministrar con continuidad, así como crecer exponencialmente, al no haber un hábito de consumo”. No obstante, con tal de llevar a conocer la gatronomía española en el extranjero e intentar crear hábtitos de consumo, Mas dels Fumeros ha desarrollado el “Spanish Breakfast”, presentando el tomate en cajas de madera y acompañado de una botellita de aceite de oliva virgen extra y escamas de sal ecológica, todo producido en Castellón. Además va acompañado de un díptico con imágenes para enseñar como se elabora el famoso “Pa amb tomàquet”. “De esta forma los consumidores solo tienen que poner el pan y el jamón”, dice Esteban Tomás. Los tomates se venden con la marca Rubby, haciendo alusión al verbo “to rub” en inglés, que significa restregar, y a la piedra preciosa roja.
El tomate de colgar de Más dels Fumeros está entre las marcas líderes de esta categoría, así como en cantidad, ya que poseen alrededor de 30 hectáreas en rotación durante los doce meses del año. La frutería tradicional, distribuidores de canal horeca y algunas pequeñas cadenas de supermercado.
Para más información:
Esteban Tomás Pérez
Mas dels Fumeros
M: +34 675 515 299
esteban@masdelsfumeros.com
www.masdelsfumeros.com