Aartsenfruit ha celebrado su 110 aniversario. Los amigos fueron recibidos con un capuchino y un dulce. También fueron a la oficina principal en Breda, y hablaron sobre el pasado, y en particular sobre el futuro de la empresa con el director general Jack Aartsen, que ha estado involucrado en Aartsenfruit durante 35 de esos 110 años. Cuando se le preguntó sobre los logros en los últimos 110 años, Jack mencionó el cambio de liderazgo entre generaciones, su decisión de recomprar el 100% de Aartsenfruit en 2002 y sus 100 años de existencia. Aunque remarcó que no le gusta mirar hacia atrás, sino hacia adelante.
Afortunadamente hay suficiente material con el que seguir adelante. En los últimos tres años han experimentado un crecimiento que no se había visto en los últimos 35 años, lo que implica más exigencia para la organización. Este mes su sede en Hong Kong se trasladó a un nuevo edificio, y también van a extender el almacén y la oficina en Breda y Venlo. Jack cuenta que está muy orgulloso de que los cuatro lugares hayan experimentado crecimiento, y que ese crecimiento lateral es la fortaleza de Aartsenfruit.
Jack comenta respecto al crecimiento, que no han hecho nada extraño y son muy transparentes acerca de lo que hacen en la empresa. Toman elecciones claras, que han ido en contra de la tendencia nacional. No suministran a supermercados y tampoco se exportan, simplemente intentan ser muy buenos en lo que hacen. Su estrategia de trabajo puede verse claramente en toda la organización. Crecieron con esta visión en los años de crisis y continúan acrecentándola.
Un efecto secundario del crecimiento rápido es la necesidad de más gente comprometida en la organización. Aartsenfruit se yergue y se cae con su gente, su primera prioridad ahora es llevar la organización a un nivel más alto, por eso han contratado a personal excepcional nuevo durante los últimos seis meses, lo cual es una tarea muy difícil.