¡Suscríbase a nuestra newsletter y manténgase al día con las últimas noticias!

Suscribirse Ya soy suscriptor

Está usted usando un software que bloquea nuestros anuncios.

Ya que publicamos noticias gratuitamente, dependemos de los ingresos de nuestros banners. Por favor, le rogamos que desactive su bloqueador de anuncios y recargue la página para poder seguir visitando esta web.
¡Gracias!

Haga clic aquí para leer la guía de cómo desactivar su bloqueador de anuncios.

Sign up for our daily Newsletter and stay up to date with all the latest news!

Suscripción I am already a subscriber
Johan Claes:

"Las navieras ven beneficios en atracar directamente en la terminal de fruta"

El muelle de 3,6 kilómetros de BNFW en Amberes, Bélgica, está muy concurrido. Los contenedores que en él se acumulan apenas dejan ver un gran portacontenedores de aguas profundas. A tan solo una docena de metros del muelle, pasa un tren de mercancías por un paso a nivel. Destino: Suiza. Carga: bananas. "Gestionamos nuestra propia red trimodal e incluso cuatrimodal (camión, buque, barcaza, tren)", dice Johan Claes, director general de Fruta y Alimentos en SEA-Invest.



En Amberes son varias las empresas que operan. En Zeebrugge, Hamburgo, Rotterdam y Sudáfrica South Africa opera SEA-Invest Fruta y Alimentos, en puertos como Amberes y Zeebrugge Belfruco, y Belgian New Fruit Wharf (BNFW). Belfruco se ocupa del despacho de aduanas y en la gestión de las cuestiones administrativas y el transporte. BNFW es responsable de la manipulación real de la carga (descarga, carga, almacenamiento, embalaje, inspección de calidad). En los muelles de Albertdok, Leopolddok y Hansdok se procesan cada año en torno a 1,2 millones de palés, de los que la mayoría se envía en contenedores. "Tenemos tres líneas de portacontenedores de aguas profundas y dos buques frigoríficos que atracan aquí directamente cada semana. Además, llega una docena de barcazas diariamente y paran aquí 400 o 500 camiones cada día", ejemplifica Johan, para dar una idea del tamaño de la empresa. Asimismo, cada semana salen para Suiza dos "trenes de bananas". La plataforma de carga del tren está en el almacén, por lo que las condiciones meteorológicas no influyen en el producto.

Cambio drástico
Aunque hace décadas que el puerto cuenta con vías férreas, el tren de frutas y hortalizas sigue considerándose un medio de transporte menos atractivo. "Un camión transporta los productos de A a B, pero un tren siempre lleva los productos de A hasta un punto de transbordo. El kilómetro final siempre es lo más caro en transporte, por lo que el transporte desde el punto de transbordo hasta B es decisivo", explica Johan. El transporte por carretera sigue siendo más caro por ese motivo. Según Johan, las historias que se cuentan sobre los problemas por atascos de tráfico en Amberes se exageran. BNFW está en la parte norte del puerto, a tiro de piedra de la carretera de acceso a la A12 y la E19. Gracias a ello, la empresa tiene una conexión rápida con Rotterdam y Alemania. El grueso de los atascos se forman en torno al centro de Amberes, más hacia el sur. "Geográficamente hablando, estamos muy bien situados aquí, casi nunca tenemos que meternos en la carretera de circunvalación", señala Johan.



Además de las instalaciones de enfriamiento y reenvasado, BNFW cuenta también con 1.200 enchufes para contenedores frigoríficos. La empresa portuaria se mueve con el mercado gracias a eso. "Hemos sido testigos de un cambio drástico. Los contenedores frigoríficos están creciendo muy deprisa", asegura Johan. "Hoy en día, ya no se construyen buques convencionales y los planes son limitados. Creo que estos barcos solo se utilizarán para nichos como la ruta a San Petersburgo". Johan prevé que, en cinco años, los contenedores frigoríficos habrán sacado fuera del mercado a los buques convencionales.

Terminal de fruta o terminal de contendores
Se podría suponer que la necesidad de una terminal portuaria de fruta podría mermar a causa de los contenedores frigoríficos. Al fin y al cabo, un contenedor frigorífico también se puede manipular en las terminales de contenedores. "Las navieras siguen viendo el valor de descargar en terminales de frutas", continúa Johan. "Muchos clientes no quieren un contenedor repleto de un determinado producto, sino que quieren solo unos palés. De esa forma, las empresas tienen menos stock propio". La gran distribución pide un palé de diversas variedades de manzanas, por ejemplo, pero no un contenedor. Los camiones se pueden cargar con envíos mixtos en la terminal de fruta.

Johan también ha advertido una mayor concentración. Si bien en el pasado los productos llegaban con más frecuencia a varios destinos, la gran distribución tiende a decantarse ahora por un solo lugar. "Es importante para la calidad y es más fácil trabajar de esa forma que con varios lugares. Dentro de la UE, todas las distancias son relativamente cortas". El primer puerto de escala es un eslabón importante para ello. En la ruta desde Perú vía Zeebrugge hasta Rotterdam de Seatrade, algunos importadores holandeses descargan los aguacates y otros productos exóticos en Zeebrugge. "Estos llegan dos días antes, lo que significa que el producto es dos días más fresco, y para algunos productos es mucho".



Robots e inspecciones
"Desde el comienzo hemos invertido en la manipulación de contenedores. Tenemos un sistema de almacenamiento de palés totalmente automatizado, lo cual incrementa la velocidad y la precisión". En los últimos años, el número de referencias ha crecido considerablemente. Por ejemplo, aunque las bananas se clasificaban antes en tres categorías, ahora existen docenas de tipos. En parte, se debe, por ejemplo, al aumento de bananas ecológicas y de comercio justo y a las marcas de los supermercados. "Un robot siempre selecciona el palé correcto".

Los contenedores se abren en la nave cerrada de BNFW. Con un puesto de aduanas permanente y un departamento de la FAVV (Agencia Federal belga para la Seguridad de la Cadena Alimentaria) in situ, todas las inspecciones se llevan a cabo tras las puertas de la empresa. "Una hora después de la llegada del contenedor, los palés pueden estar en los camiones", asegura Johan. "Los puestos permanentes de aduanas y la FAVV ahorran tiempo". Los contenedores se vacían en la nave del puerto. Johan explica que se debe a la diferencia entre los contenedores marítimos y el espacio de los camiones. Los contenedores marítimos tienen cabida para 20 palés, mientras que en los camiones caben 24. Puesto que los camiones pueden transportar un 20% más de carga y no hay que devolver el contenedor vacío, los precios por unidad descienden, comenta Johan.

No obstante, también añade otro motivo para abrir los contenedores. Las inspecciones de calidad se hacen en Amberes, unas horas antes de la entrega, y no cuando los contenedores se están cargando al otro lado del océano. Nueva Zelanda y Latinoamérica siguen siendo los orígenes más importantes de las llegadas en BNFW. Se puede observar un pequeño cambio con el surgimiento, por ejemplo, de las bananas ecológicas de comercio justo de la República Dominicana, y Surinam, con el que se inició un servicio el año pasado.

Más información:
Sea Invest
Johan Claes
Fecha de publicación: