La lechuga iceberg egipcia ha encontrado su hueco en los mercados ruso, ucraniano y en países del Golfo. Tanto es así que “esperamos disponer de un 15% (200 toneladas) más de producto con respecto al año pasado para abastecer la demanda de estos países”, explica Sherif Kamel, de la empresa Freshland.
No obstante, éstos no son los únicos destinos en los que se comercializa este producto. “Estamos en negociaciones con Reino Unido como parte de nuestro plan para abrir el mercado europeo. Allí esperamos poder enviar nuestras lechugas por avión para acortar los tiempos de entrega”. Sin embargo, la presencia de lechuga iceberg de origen español, que tiene una mejor situación estratégica que la egipcia para la comercialización, así como los grandes volúmenes producidos por China, suponen una gran competencia para el país norteafricano.
“Sabemos que en los países en los que ya trabajamos, estamos bien asentados. Podemos decir que cerca del 70% de la lechuga Iceberg que se envía a Arabia Saudí, Kuwait o Emiratos Árabes se destina a la industria de la comida rápida”, comenta. Además, “establecimos una nueva sucursal en Alemania con certificados de confianza del gobierno para fomentar el consumo de nuestros productos en los países de la zona Euro”.
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Sherif Kamel, Export Manager
Fresh land For Import & Export
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