Los Reyes Magos no dejaron un regalo agradable en el campo de Almería. Un tornado nunca visto en la costa almeriense se adentró en los términos municipales de El Ejido, tanto en la ciudad como en los invernaderos donde se produce principalmente pimiento, dejando destrozos muy graves que tardarán en restaurarse. De momento, fuentes del sector cuantifican en más de 200 las hectáreas afectadas, principalmente de pimiento, y alrededor de 40 millones de euros, cifras que pueden aumentar en los próximos días a medida que se evalúen todos los daños.
"Nunca se había visto algo así en Almería", cuenta José Antonio Baños, presidente de la cooperativa Ejidomar, cuyos agricultores se han visto perjudicados. "Hay invernaderos dañados a tan sólo 300 metros de nuestra cooperativa. Este tornado, que cruzó desde el mar toda la zona de invernaderos arrasando todo a su paso, es histórico. Además de ese tornado, también se han visto otros de menor envergadura que también han causado muchos desperfectos. Afortunadamente, al ser un día festivo, no había mucha gente trabajando en el campo".
Quien sí se encontraba en sus campos era Manuel Matías Salas, un agricultor que vivió en primera persona el paso del tornado que arrasó sus invernaderos de pimiento. La organización Coag ha publicado el estremecedor testimonio de este agricultor en sus redes sociales.
Manuel Matías Salas, en los alrededores de su invernadero. Foto de Coag.
"Cuando vi venir el tornado me escondí debajo del camión, con tan mala suerte que el centro del tornado pasó por encima, levantando el camión. Me aferré a la transmisión el camión pensando que me iba a caer encima y todo iba a terminar ahí", cuenta el agricultor.
Cuando pasó el peligro, el agricultor se encontró sus invernaderos arrasados, tanto la estructura como la cosecha. "Lo primero que hice fue dar gracias por estar con vida.Todavía me faltaba por recolectar alrededor del 50% de la cosecha de esta campaña. Llevo dedicado a esto desde los 8 años, sin hacer nada más que trabajar, y el día de Reyes me ha tocado 'este regalo' que echa a perder toda una vida de trabajo".
"Todavía queda mucha campaña por delante, por lo que mientras que algunos invernaderos estaban a medio recolectar, otros estaban completamente por recolectar", continúa José Antonio Baños, presidente de Ejidomar. "Hay invernaderos que solo se han visto dañados en el la parte superior que los cubre, mientras que otros han sido completamente devastados"
De media, los agricultores almerienses disponen de entre dos y tres hectáreas de invernadero, de las que depende el sustento de toda la familia. De acuerdo con Andrés Góngora, presidente de Coag, una hectárea de invernadero en condiciones cuesta, solamente en infraestructuras, alrededor de los 150.000 euros.
"Hay muchos agricultores que han perdido todas sus explotaciones. Hay que poner en marcha un plan para levantar las estructuras y que puedan seguir produciendo. Estamos ante una situación muy grave en la que espero que las administraciones públicas estén a la altura y las aseguradoras se porten lo bien que nos dicen que lo harán cuando se contratan los seguros", indica Andrés Góngora.