La tecnología láser para frutas y hortalizas tiene cada vez más aplicaciones de productos. El precio de coste del láser de productos frescos ahora equivale al de las pegatinas o envases de plástico. Según Michaël Wilde, de Eosta, es sólo cuestión de tiempo que se llegue al punto decisivo, y tanto los envasadores como los supermercados no puedan escapar de la tecnología láser.
"La posibilidad de que el uso de plástico se encarezca es bastante alta, especialmente si se logran los acuerdos climáticos". Sin embargo, no cree que el plástico desaparezca por completo. "El plástico sólo tiene un papel si es funcional".
Cálculo de costes
"El plástico sigue siendo barato en proporción, pero no se trata tanto de que lo sea, sino de cuánto tiempo seguirá siéndolo. En cuanto el daño ambiental causado por la 'Isla de Basura' se calcule a prorrata, y los costes de inversión de la tecnología láser se hayan recuperado, se llegará a ese punto decisivo", continúa Michaël.
Argumento de frescura
Para algunos productos, sin embargo, el plástico seguirá siendo necesario por un tiempo. "Para productos como los arándanos, el plástico realmente juega un papel importante para mantener el producto fresco y, por lo tanto, sigue siendo importante. Pero también puede hacerse una distinción entre plástico reciclable y plástico no reciclable. Sin embargo, es revelador que el argumento de la frescura de los defensores de los envases de plástico no siempre se aplica. Un estudio de una cadena de supermercados sueca demostró, por ejemplo, que las frutas y hortalizas sin envases de plástico se venden más rápido. La mayor velocidad de circulación también se tradujo en un consumo más rápido, por lo que el problema de la frescura no fue tan relevante".
Sector convencional
La tecnología láser se introdujo por primera vez para reducir el uso de envases de plástico en los surtidos ecológicos de los supermercados. La tecnología también empieza a ser interesante para el sector convencional, debido a los desarrollos actuales y los costes favorables, por lo que no supone un problema según Michaël. "Todavía es fácil diferenciar los productos frescos ecológicos por sus marcas y logotipos", concluye.
Para más información: www.eosta.nl