CLAC
Explica que en Comercio Justo hay Organizaciones Nacionales Fairtrade responsables de la promoción del comercio justo en los diferentes mercados de consumo. Por otra parte, existen redes de productores en las regiones de producción, como es el caso de la CLAC en América Latina. “Es la red de pequeños productores y trabajadores más antigua, porque Comercio Justo comenzó en América Latina hace 30 años. La Red se encarga de toda la ayuda al productor. Trabajamos con personal de campo en los diferentes países, que presta asistencia, por ejemplo, en aspectos de certificación o de mejora de la producción. Así mismo, la coordinadora se encarga de importantes aspectos sociales tales como el género, la protección infantil y, por supuesto, el cambio climático. En función del producto, estas cuestiones tienen más o menos relevancia, pero ayudamos a las personas a definir y poner en funcionamiento programas para fomentar el trabajo en torno a estos temas”.
“Las empresas que comercializan productos Fairtrade pagan una licencia, lo cual permite a organizaciones como CLAC contar con un presupuesto para ayudar a los productores, una vez más. Además, el sistema Fairtrade garantiza el pago de primas de Comercio Justo, que, en el caso de la banana, significa que 1 dólar de cada caja de esta fruta se destina directamente a la organización de productores o al comité de trabajadores en el caso de plantaciones. Este aspecto es el más visible de Comercio Justo, porque los productores o los trabajadores emplean ese dinero para financiar proyectos en el campo”.
Nuevos mercados
El papel de las Organizaciones Nacionales de Comercio Justo en los diferentes mercados es convencer a las compañías de vender bananas de Comercio Justo. “No promocionamos la certificación de nuevos productores en sí misma, pues primero tenemos que tener un aumento de la demanda en los mercados de destino. Por ejemplo, la presencia de Comercio Justo ha aumentado mucho en los últimos años, pero necesitamos incrementar el número de importadores y minoristas que quieran vender bananas de este sello. A estas compañías se les aconseja trabajar con nuestras cadenas de suministro que ya tienen certificación de Comercio Justo. Sin embargo, en caso de que prefieran conservar su propia cadena de suministro, podemos ayudar con la certificación”.
Nicolás explica que, en algunos casos, es necesario aumentar la producción de bananas de Comercio Justo primero. “Hace unos años, no teníamos bananas de Comercio Justo en México. Sin embargo, es un país importante porque es el principal proveedor de frutas y hortalizas para los Estados Unidos. Obviamente, los Estados Unidos pueden importar de otros países, aunque es fácil tener algunos proveedores en México ahora”.
Orgánicas y convencionales
Estos últimos año, el desarrollo del mercado de Comercio Justo se ha visto impulsado, principalmente, por la banana orgánica, concluye Nicolás. “En torno al 50% de la oferta de Comercio Justo es orgánica. Estamos tratando de equilibrarla, pues la producción de banana convencional, en general, es mucho mayor que la de banana orgánica. Asimismo, estamos intentando abrir mercados dispuestos a comprar bananas convencionales de Comercio Justo para, por ejemplo, que en la gran distribución solo se ofrezcan este tipo de bananas. En Colombia y en la República Dominicana hay productores cuya producción es de Comercio Justo, pero no es orgánica, así que tenemos que encontrar mercados también para ese producto”.
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