En los restaurantes en particular, continúa la tendencia hacia una mayor introducción de frutas y hortalizas en las comidas. Esto es positivo porque cada vez más personas comen fuera del hogar. En las tiendas, los consumidores gastaron un 2 por ciento más en frutas y hortalizas. Compraron la misma cantidad de frutas y hortalizas por visita a la tienda que en 2016, pero el número de visitas disminuyó, y con ello el consumo en el hogar.
La compra de frutas y hortalizas frescas en la hostelería aumentó un 13 por ciento en comparación con el año pasado. Este aumento sólo compensa parcialmente la menor compra de los hogares.
Los consumidores compraron un 3 por ciento menos de frutas y hortalizas frescas en peso, y pagaron un 2 por ciento más por estas. Principalmente compraron productos más caros. Esto es evidente a partir de la información de GfK. Estas cifras incluyen compras realizadas en línea. Según el último RIVM Voedsel Consumptionie Peiling (Encuesta de Consumo de Alimentos) (2012-2014) un adulto come un promedio de 139 gramos de hortalizas y 113 gramos de fruta al día. Esto está por debajo de la cantidad diaria recomendada, que es de 250 gramos. Todavía es necesario insistir en el consumo de frutas y hortalizas en el hogar. El Nationaal Actieplan Groenten en Fruit (Plan de acción nacional para frutas y hortalizas) trabaja para lograrlo, incluso a través de Veggipedia.nl, un sitio web lleno de información sobre el tamaño de las porciones, recetas y consejos de alimentación.
Un tercio de las compras de hortalizas son preprocesados
Del volumen comprado de hortalizas frescas, el 22 por ciento es preprocesado. Los consumidores gastan el 34 por ciento de su presupuesto en hortalizas preprocesadas; en la fruta las cifras suman el 3 por ciento. Las ventas de ensaladas han aumentado. El porcentaje del volumen de ventas de hortalizas en los supermercados es aún más pequeño, del 2 por ciento. También se gastó más en hortalizas y frutas ecológicas en el supermercado. La facturación en este grupo de productos aumentó en un 5 por ciento. La popularidad de la comida preparada se redujo ligeramente. El 2 por ciento de los hogares compraron un envase de comida preparada al menos una vez el año pasado, la cantidad de compradores disminuyó.
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