Ahmed Derrab, secretario general de la ASPAM (Asociación de Productores de Cítricos de Marruecos), prevé un ligero incremento del 3% en volumen en 2017/2018 debido a las nuevas plantaciones que están entrando en producción. Esta cifra demuestra el dinamismo que ha cobrado el sector en los últimos años, pero todavía no llega al volumen objetivo, pues tan solo ha alcanzado 2,9 millones de toneladas en la última década.
Está previsto que el volumen de exportación se sitúe entre 650.000 y 680.000 toneladas hacia finales de la temporada en junio, también por debajo de las expectativas (1,3 millones de toneladas).
El sector citrícola marroquí cubre casi 125.000 hectáreas y se exporta principalmente a Rusia, la UE y Canadá.