Al igual que en muchos países europeos, las temperaturas extremadamente frías de finales de febrero y principios de marzo han ocasionado importantes pérdidas en albaricoques y melocotones en el oeste de Hungría, así como de melocotones en el sur. Afortunadamente, los albaricoques del noreste del país no se han visto afectados, lo que significa que el país no ha perdido toda su producción.
Con las plantaciones en floración, Peter Kelemen dijo que ahora es más fácil tener una mejor idea de lo que la ola de frío, 'beast from the east' (bestia del este), ha estropeado.
Peter reportó que los daños en los capullos de las flores de cerezos, de variedades dulces y ácidas, están entre el 10-50%, con más daños en las variedades de floración temprana y menos en las tardías. Se informó de muy pocos daños en las ciruelas, mientras que de ninguno en la producción de manzanas y peras.
"A pesar del daño a los capullos de los cerezos, esto no significa que al final no tengamos una buena cosecha. El clima en abril ha sido estable con temperaturas agradables, con un poco de viento a veces, pero las condiciones en general han sido buenas", explica Peter.
"Las temperaturas bajo cero no fueron tan perjudiciales para las cerezas como para los albaricoques y los melocotones. De hecho, las flores de cerezo son las mejores que hemos visto en los últimos 5 años, lo que nos da muchas esperanzas de tener una buena cosecha. Mientras no haya ningún evento climático inusual, espero una buena cosecha de cerezas, ciruelas, manzanas y peras".
Peter Kelemen
Agro-Consulting Trade Kft.
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