Los datos correspondientes a las compras de frutas y hortalizas frescas en el primer trimestre de 2018 revelan dos cosas importantes: en primer lugar, se ha producido un incremento del 1% de las compras en cantidad gracias a la bajada de los precios. En segundo lugar, la obligación de utilizar bolsas biodegradables ha llevado a una caída en la venta de productos a granel y a un incremento sin precedentes en la compra de productos envasados.
Ha crecido la compra de hortalizas (+6%), patatas (+3%), productos de IV gama (+3%) y cítricos (+6%), mientras que la de fruta ha descendido un 10%. Dado que los precios medios de las categorías principales han bajado, las cantidades gastadas han disminuido un 2,5% en comparación con el primer trimestre de 2017.
Si bien las compras de productos a granel han caído un 3,5% (-7,8% en dinero gastado), se ha producido un incremento en la compra de productos envasados (11% en volumen y 6,5% en valor). La reacción adversa instintiva de los consumidores a la introducción de estas bolsas podría haber acelerado un proceso que ya había comenzado. Lo que sorprende es la velocidad que ha ganado esta tendencia con la entrada en vigor de la nueva norma. De hecho, las ventas de productos envasados en los tres primeros meses de 2018 suponen un 32% del total frente al 29% del año anterior.
Los productos envasados cuestan, de media, un 43% más que los productos a granel, aunque hay excepciones en aquellos productos de calibre o calidad superior. Por ejemplo, los cítricos y las patatas vendidas a granel se venden con precios un 6% y un 2% más caros, respectivamente. En el caso de los tomates, los productos envasados cuestan un 75% más.