El sector bananero australiano avanza hacia una gestión a largo plazo para la TR4

El sector bananero de Australia está avanzando hacia una estrategia a largo plazo para la enfermedad de Panamá TR4, con la incorporación de una empresa de consultoría independiente para desarrollar un plan de control y contención.

Como la enfermedad no se puede erradicar, ACIL Allen ha sido contratada por el Departamento de Agricultura y Pesca de Queensland (DAF) para recomendar un modelo justo y realista para la gestión de Panamá TR4 en el futuro.

"Los consultores están llevando a cabo un análisis de costes-beneficios sobre el control y la contención de Panamá TR4 en Queensland", dijo el líder del programa DAF Panamá TR4, Rhiannon Evans. "Esto incluirá qué elementos, si los hay, del programa actual podrían reducirse o cesarse, y cómo deberían realizarse y financiarse las actividades en curso".

Sigue habiendo tres fincas comerciales de banana en Tully Valley confirmadas con Panamá TR4. Una finca fue comprada por ABGC y se cerró, mientras que dos todavía están activas. Bioseguridad Queensland continúa trabajando con las empresas para garantizar que se mitigue el riesgo de propagación de enfermedades en el sector en general, a la vez que respalda a los propietarios de negocios para comerciar y cumplir con sus responsabilidades actuales de bioseguridad.

"Aunque todavía se desconocen muchas cosas sobre la enfermedad, que después de casi tres años sólo tengamos tres propiedades infestadas confirmadas, muy cerca las unas de las otras, muestra que nuestra respuesta rápida, la adopción de medidas de bioseguridad de los productores y el enfoque de asociación en el sector están logrando minimizar la propagación", explicó Evans. "La investigación continúa buscando una planta de banana comercialmente viable con alto rendimiento y buena calidad, que también sea más resistente a la enfermedad de Panamá y otras plagas y enfermedades".

ACIL Allen está trabajando con DAF y el máximo organismo del sector, el Consejo de Productores de Banana de Australia (ABGC), un conjunto de productores y otras partes interesadas del sector para recopilar información para su análisis. Evans dice que el borrador final del informe de ACIL Allen está previsto para el próximo mes.

"Hay mucha incertidumbre sobre cómo podría propagarse la enfermedad con el tiempo. No es erradicable por ningún control biológico o químico, y por eso hemos contratado a ACIL Allen para diseñar un plan que sea ampliable, reflexivo y adaptable a los requisitos de los interesados, ante la posibilidad de futuras detecciones de volumen y rapidez desconocidas. La enfermedad de Panamá es una enfermedad difícil de manejar, puede permanecer latente en el suelo durante décadas sin plantas hospedadoras y actualmente no hay forma de evaluarla en el suelo o en el agua".

DAF dice que el control y la contención siguen siendo la mejor defensa, y esto implica la detección temprana de la enfermedad a través de la supervisión regular, que es la forma más efectiva de proteger las fincas bananeras y extender la viabilidad de las mismas.

"Si se detecta Panamá TR4 en la finca de un productor, existen requisitos de bioseguridad que deberán cumplir para continuar comercializando y proteger al sector en general", comentó Evans. "Estamos ayudando a los productores a comprender sus requisitos de bioseguridad para minimizar el tiempo de inactividad de la finca si se detectara Panamá TR4 en su propiedad. Queremos un sector flexible y resistente que pueda responder a las incertidumbres de la enfermedad en el futuro".