La oferta de batata es escasa en este momento. "Tanto la nueva cosecha española como la norteamericana se han retrasado. En España, no pudieron plantar porque las temperaturas eran demasiado bajas, y en los EE. UU. no pudieron porque hubo demasiada lluvia. En condiciones normales, las primeras batatas españolas ya estarían en el mercado, pero la oferta se ha retrasado de tres a cuatro semanas", dice Christiaan van der Goes, de Greengoose.
Durante las próximas tres semanas, el importador espera, por lo tanto, una escasez considerable en el mercado. "Se están cosechando las batatas españolas, pero tienen que endurecerse para estar listas para la venta. En los EE. UU., comenzarán a cosechar a principios de septiembre, por lo que la nueva cosecha no llegará a Europa hasta principios de octubre como muy pronto. El mercado está en un punto de inflexión, por un lado seguimos esperando la oferta de España, y por el otro, la oferta de los EE. UU. llega poco a poco, lo que resulta en un mercado con buenos precios".
En este momento, Greengoose recibe productos de Egipto y los EE. UU. todas las semanas, y en pocas semanas también de España, tanto convencionales como ecológicos. "Esperamos recibir nueva oferta de Covingtons americanas al menos dos meses más. Será difícil poder cerrar la brecha antes de la nueva cosecha", continúa Christiaan, quien está impresionado con la calidad del producto egipcio. "Ahora también ofrecen variedades como Beauregard, y en los últimos años han mejorado considerablemente su calidad".
Los proveedores dicen que enviarán menos batatas debido al año difícil, aunque Christiaan dice, por experiencia, que la situación no será tan mala. "Pero eso es inherente a nuestro comercio". Greengoose vende batatas en toda Europa, desde Escandinavia hasta Europa del Este y del Sur. "Con los años, el volumen ha aumentado considerablemente. Las ventas en los Países Bajos todavía no se han desarrollado del todo".
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