En 2007, la prohibición que Sudáfrica impuso a la importación de aguacates keniatas tenía la intención de ser una medida de protección de la fruticultura nacional ante la mosca oriental de la fruta. El Gobierno sudafricano aplicó la prohibición después de que Kenia informara de la presencia de plagas de la dañina mosca oriental de la fruta (Bactrocera dorsalis) en varias de sus fincas frutícolas por aquel entonces.
En entrevista con Farmer’s Weekly, Derek Donkin, CEO de Subtrop, organización que se encarga de los asuntos de la Asociación Sudafricana de Productores de Aguacates, decía: "Sudáfrica aplica unos controles internos estrictos al movimiento de fruta desde zonas con presencia de mosca oriental de la fruta. Asimismo, aplica estrictos controles a la fruta que entra en el país".
Añade que antes de la entrada en vigor de la prohibición de las importaciones de aguacates de Kenia en 2007, Sudáfrica importaba esta fruta para compensar la caída de la producción y el suministro nacional en temporada baja. Si bien Donkin no pudo aportar cifras de los volúmenes de importación de aguacates de Kenia previos a 2007, señaló que se trataba de una cantidad relativamente pequeña.