Las máquinas expendedoras de productos agrícolas y ganaderos llevan usándose en Alemania desde hace veinticinco años para vender estos productos a los locales y a los visitantes, pero ahora también están poniéndose de moda en otros países europeos. “En Alemania, hay muchas tiendas de productos del campo y la granja. Abren uno o dos días y el resto de días se puede comprar el producto a través de máquinas expendedoras”, explica Chris Verhoeven, de Automaten Centrale, que asistió a Potato Europe por parte de Roesler Automaten, como importador para el mercado belga y neerlandés.
Hace poco, Verhoeven ha suministrado una máquina expendedora a un productor de tomates belgas, que ha puesto un pequeño espacio de venta en sus instalaciones de almacenamiento para vender localmente. La máquina acepta tanto monedas como billetes como pago y también cuenta con un software moderno que realiza estadísticas de ventas y diagnósticos. Gracias a un nuevo avance, se están conectando las máquinas con webs de venta donde los clientes podrán hacer el pedido de sus productos y recibir un código para recogerlos en las máquinas expendedoras.
“Solían ser los abuelos los que atendían las ventas locales, pero esto es algo del pasado. Las máquinas expendedoras han ocupado ese lugar. Suministramos máquinas frigoríficas y no frigoríficas. En los Países Bajos el precio de una máquina expendedora media está entre 6.000 y 7.000 euros”, explica Chris, quien comenta también que todavía no hay mucha competencia en el mercado de las máquinas expendedoras. “Sigue habiendo un nicho de mercado. Alemania fue pionera, pero el resto de países le están siguiendo rápidamente. En realidad, es como una tienda sin personal”.
Más información:
Automaten Centrale
Blaktweg 16
5962 NH Melderslo
Chris Verhoeven
Móvil: +31(0)6-40585089
c.a.w.verhoeven@planet.nl
www.automatencentrale.nl
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