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Jeremy Sessions indica: "Si salvamos la parte principal del árbol, podremos volver en primavera, podar la madera muerta y, con suerte, en uno o dos años, el árbol tendrá el tamaño que tenía".
Podría parecer contraproducente proteger los árboles del frío con hielo; sin embargo, el hielo actúa como una barrera aislante. Los árboles más vulnerables son los árboles jóvenes.
"Naturalmente, cuanto más joven es el árbol, más sensible es al frío, así que tratamos de asegurarnos de cubrirlos bien sin pasarnos de hielo para no estropearlos", apunta Sessions.
Esto se añade al intenso frío del pasado invierno, que diezmó la cosecha de este año. La mayoría de árboles sobrevivieron, pero se pasaron el verano recuperándose sin producir fruta. Sessions señala que la cosecha fue un 90% menor de lo normal.
"Esperemos poder protegerlos lo suficiente este año y que el invierno no sea tan duro como lo fue el año pasado, para que esta primavera tengamos una buena cosecha", concluye Sessions.
Source: fox10tv.com