Un representante de Pipfruit New Zealand, la organización que apoya a los productores de manzanas y peras de Nueva Zelanda, señala que la cosecha de manzanas de este año se ha retrasado entre una y dos semanas.
Gary Jones indica que todos los años se da una variación natural de los tiempos de cosecha y que el retraso no ha sido nada fuera de lo normal. Añade que la cosecha en la Bahía de Hawke empezará entre mediados y últimos de febrero para las variedades de exportación más abundantes, como la Royal Gala. La Pacific Beauty estará disponible, pero no se ha cultivado en grandes cantidades a causa de que su vida útil es más corta.
Según él, el retraso no afectará a los precios, pero la cosecha podría ser "compacta e intensa", lo que significa que se cosechará un número normal de manzanas en un periodo más corto.
La escasez de manzanas en las fruterías y supermercados de Auckland se ha hecho evidente en las dos últimas semanas, y al menos cinco tiendas distintas han ofrecido una selección reducida en la sección de manzanas.
En el establecimiento Countdown Metro de Victoria Street en Auckland, el martes solo había una variedad de la fruta, importada de los Estados Unidos. Una portavoz de la compañía culpó de la escasez a una primavera fría y lluviosa, combinada con algunos episodios de granizo. "Actualmente estamos pasando del suministro de ultramar de manzanas a las manzanas locales de nueva temporada, así que los compradores habrán observado que había menos manzanas en la tienda la semana pasada debido a que la temporada se ha retrasado".