"El mercado ruso ha estado disponible, pero no ha sido viable exportar, por lo que el porcentaje ha disminuido. Este año, [los estados de] Andhra Pradesh y Karnataka no han exportador", señala Khapare.
"Esta ha sido la peor campaña de mi vida. En general, el viticultor se ha visto afectado gravemente por la naturaleza, la política y la economía", asegura Kailas Bhosale, presidente de la asociación de viticultores Draksha Bagiatdar Sangh.
"También hemos tenido que hacer frente a la caída del euro y el rublo. Esta devaluación de la divisa ha contribuido a una pérdida de casi el 30 por ciento en precios", añade Bhosale.
En la India, la temporada de la uva y las exportaciones comenzaron pronto; a finales de noviembre el año pasado, mientras que lo normal es entre el 15 de enero y la primera semana de febrero. Las uvas indias cuentan con un mercado de mucha exportación porque las uvas no están disponibles en ningún otro país tan pronto.
Por ahora, la mayoría de los viñedos de Nashik, Sangli, Solapur y Pune ya han sido vendimiados. Por tanto, las exportaciones durante esta semana no supondrán mucha diferencia en cantidad. La mayoría de las exportaciones de alrededor de 32.000 toneladas este año son de Nashik, mientras que otros distritos han contibuido con alrededor de 3.000 toneladas.
En enero de este año, Khapare señala que, pese a las inclemencias del tiempo, que afectaron a los viñedos, prevén que las exportaciones de uvas alcancen las 200.000 toneladas. Sin embargo, las granizadas afectaron negativamente a la cosecha más tarde y la mayoría de los viñedos a punto de ser cosechados quedaron destruidos.
Fuente: asianage.com