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Somalia experimenta una reactivación del cultivo de la banana tras el conflicto

Antes de la sangrienta guerra civil que derrocó al Gobierno central en 1991, la industria bananera de Somalia era la mayor del continente, pero se vio destruida porque los bandos en guerra no solo saquearon las compañías que procesaban y exportaban la fruta, sino que hicieron que cultivar en las riberas de los ríos Shabelle y Juba, los principales de Somalia, fuera demasiado arriesgado.

Los productores abandonaron sus herramientas y sus plantaciones y partieron hacia los campos de refugiados de los países vecinos. Algunos siguen todavía en el extranjero, mientras que otros apenas sobreviven en los superpoblados campos de desplazados internos que rodean las principales ciudades del país.

Sin embargo, mientras vuelve una relativa estabilidad al país, los productores se han ido aventurando a volver a sus plantaciones cada vez en mayores números. Las plantaciones que se abandonaron por la guerra llevan tiempo dominadas por las malas hierbas y los árboles silvestres y ahora están reclamándose y cultivándose de nuevo. Cientos de locales sin trabajo desde hacía años han encontrado una forma de recuperar un medio de vida.

A diferencia de muchas otras regiones del país que dependen de las impredecibles temporadas de lluvia del este de África, Afgoye es exuberante durante todo el año gracias al río Shabelle, que fluye a través de la localidad.

Estos últimos veinte años, los productores han estado esperando cierta sensación de normalidad para regresar y volver a coger sus herramientas.

Siga leyendo en mareeg.com (en inglés).
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