Tras un periodo sin precedentes de continuados precios altos y bajos niveles de suministro, el mercado californiano de la coliflor ha cambiado debido al tiempo cálido y húmedo en las regiones productoras del desierto.
"Todos los compradores están atascados", indica Chris Amaral, de Amaral Ranches. "No pueden afrontar el cambio".
Según Amaral, sus productores de coliflor del estado han sufrido escasez desde principios de noviembre. "Durante unos tres meses, ha sido una locura", dice, y señala que los precios FOB oscilaron constantemente entre 40 y 50 dólares durante ese periodo. "Es uno de los mercados [de precios altos] más prolongados que he visto en mucho tiempo".
Amaral explica que la escasez comenzó en Salinas y después continuó cuando la producción cambió al desierto. "Salinas acabó en torno a un mes antes", apunta Amaral.
Los culpables, el calor y la lluvia
Sin embargo, las condiciones meteorológicas en el desierto se han vuelto más húmedas y cálidas en las últimas semanas, lo que ha provocado un cambio drástico en el mercado. "El suministro acaba de empezar", dice Amaral. Debido al calor y la lluvia que está afectando a las explotaciones del desierto, la producción ha repuntado y los proveedores se han visto inundados de cultivo. Tras los precios de entre 40 y 50 dólares de noviembre, diciembre y principios de enero, ahora los precios se han desplomado hasta entre 8 y 14 dólares.
Amaral señala que, dado que depende de las condiciones meteorológicas, la coliflor es propensa a las fluctuaciones. "La coliflor tiende a comportarse de forma muy imprevisible". Por ello, Amaral indica que la caída repentina del precio es más acorde a las condiciones típicas de mercado que los continuados altos precios de los tres últimos meses. Por tanto, Amaral opina que el mercado regresará a sus patrones habituales muy pronto. "Se nivelará", concluye.
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Chris Amaral
Amaral Ranches
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