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La UE impone una multa de 5,2 millones de euros
La española Riberebro es multada por pertenecer a un cártel de setas y champiñones
La Comisión Europea ha multado a la conservera española Riberebro con 5,2 millones de euros por formar parte de un cártel. La compañía pactaba con sus competidores los precios de las setas y los champiñones.
El cártel del champiñón estaba formado por Lutece, Prochamp y Bonduelle. En junio de 2014, estas compañías ya habían llegado a un acuerdo con la Comisión Europea por una cantidad de 32 millones de euros, pero Riberebro se negó. En mayor del año pasado, a la conservera española se le ofreció la oportunidad de defenderse. En un comunicado publicado en su página web, Grupo Riberebro anunció que había "cooperado totalmente" con la investigación y había ofrecido a los investigadores la "máxima transparencia". La compañía está considerando recurrir la multa.
"El acceso a los alimentos a precios competitivos es esencial en el Espacio Económico Europeo", señala la comisaria europea Margrethe Verstager. "El cártel del champiñón en conserva ha afectado a las ventas de los minoristas, de los mayoristas y de las compañías de servicios de alimentación".
Los pactos de precios se fijaron para las setas y champiñones en latas y tarros de cristal, no a los frescos o congelados, que se vendieron en Europa con una marca privada. El propósito de los miembros del cártel era estabilizar la cuota de mercado y evitar la caída de los precios. Así pues, intercambiaban información sensible, convenían precios mínimos y volúmenes y se repartían los clientes.
Riberebro fue miembro del cártel desde el 10 de septiembre de 2010 hasta el 28 de febrero de 2012. La investigación del cártel inició inspecciones sin previo aviso en las compañías en febrero de 2012.