Una importante empresa de la industria hotelera advierte de que las nuevas leyes de salario de Reino Unido podrían convertir a las fresas británicas en "un lujo inasequible" y acabar con casi el 60% de los beneficios de los productores el año que viene.
Se prevé que se venderán más de 140.000 raciones de fresas con nata durante los quince días de Wimbledon de este año —fecha que suele considerarse el inicio de la temporada británica de fresas—, pero el asesor hotelero Beacon ha advertido de que las plantaciones se enfrentan a un futuro nefasto y económicamente insostenible después de la introducción del nuevo salario mínimo en abril.
Beacon, que representa a unos 2.000 negocios independientes de los mercados de la hotelería, el ocio y los centros asistenciales, además de a los proveedores —incluidos negocios de productos agrícolas frescos regionales—, afirma que los proveedores prevén que el precio de las fresas aumentará este año a causa de la presión sobre el salario digno nacional de los agricultores de Reino Unido. Algunos predicen el cierre de las plantaciones británicas, ya que las fresas se convertirán en una actividad poco rentable y se sustituirán en los supermercados por importaciones más baratas.
La advertencia se hace eco de las palabras de un informe reciente del Sindicato Nacional de Agricultores (NFU, por sus siglas en inglés), que revela que el impacto del nuevo umbral de salario mínimo podría costar a los productores el 58% de sus beneficios de forma inmediata, mientras que, a lo largo de los próximos cuatro años, podría costar a las empresas de alimentación fresca hasta el 158% de sus beneficios empresariales actuales, lo que volvería al cultivo de fresas completamente improductivo para los productores británicos sin apoyo gubernamental adicional.
El año 2015 ha sido histórico para las fresas británicas, con ventas de 325 millones de libras, que superan con creces el récord de 275 millones de libras en 2014. Sin embargo, Paul Connelly, director gerente de Beacon, declara: "Parece que los campos de fresas no durarán para siempre en la campiña británica".
Otros agricultores de productos agrícolas frescos se verán afectados por el salario digno nacional, según Beacon, y, probablemente, las industrias agrícolas con mucha mano de obra son las que más sufrirán. Los agricultores de hortalizas esenciales como las lechugas, los pepinos, los pimientos y los tomates cherry están especialmente en riesgo a raíz de este nuevo umbral de salario, combinado con el aumento de los costes de producción y las agresivas guerras de precios de los supermercados.
Fuente: theguardian.com