Sicar Farms cultiva limón mexicano (key lime), limón persa y lemon entre de otros productos. La temporada de las dos primeras transcurre durante todo el año, con un pico entre marzo y agosto. Los limones, por otra parte, se cosechan entre septiembre y noviembre, y se destinan sobre todo al sector fresco y a la industria.
“Actualmente, estamos en la temporada alta de limas. Hace 3 o 4 meses, una caja de 40 libras (18 kg) se vendía a 35 dólares y ahora está alrededor de los 8 o 10 dólares. Es normal en temporada alta, es un ciclo”, explica Gudiño sobre el mercado. Añade que, a diferencia de otros años, la temporada alta de este año parece estar muy concentrada en los meses de verano. “Creemos que este acortamiento de la temporada alta se debe a las condiciones meteorológicas frías y a las lluvias tardías”.
Sicar Farms es una empresa familiar que trabaja sobre todo con cítricos, aunque ha puesto en marcha recientemente una nueva línea de negocios con la plantación de tomates, piñas y cocos. Actualmente cuenta con 2500 hectáreas de Limón en las diferentes zonas productoras de este fruto en el país y su meta a mediano plazo es la de tener 5000 hectáreas para producción.
Su mercado más importante en exportaciones es Estados Unidos, donde destina el 80% de sus exportaciones. El 20% restante se reparte a partes iguales entre Europa y Asia. “Asia se está volviendo más importante; aún tenemos algo de margen, ya que todavía no se ha abierto el protocolo entre México y China. Para Corea solo existen permisos para exportar desde el estado de Veracruz, por lo que Corea y Japón los únicos países de Asia a los que podemos exportar. Sin lugar a dudas, cuando el mercado chino se abra, las oportunidades de negocio aumentarán. “Asia es un mercado grande e importante”. La compañía no percibe demasiada competencia de Brasil en el mercado de exportación de Estados Unidos.
El Grupo Ochoa Gudiño está integrado por SiCar Farms, que posee tres plantas de empaque en México: una en Colima, otra en Michoacán y la tercera en Veracruz, Citrojugo, una planta en donde se procesan alrededor 1.000 toneladas diarias de limón y lemon para transformarlo en jugos, aceites, cáscara, y Limex SiCar como centro de distribución en los Estados Unidos.
La compañía está probando un método de cultivo sin pesticidas. “El año pasado, adoptamos una nueva forma de trabajo al aumentar el uso de abono, control biológico e introducir el uso de repelentes extraídos de algunos productos como chiles, canela, cebollas y ajos, teniendo así un enfoque agroecológico. Nuestro objetivo para el 2017 es el de eliminar el uso de todos los pesticidas en nuestras plantaciones”, explica Gudiño. “No podemos llamarlo como tal agricultura ecológica, pero sí forma parte de nuestros planes el eliminar por completo el uso de pesticidas combinando fertilización agroecológica y convencional”.
“El año pasado, hicimos pruebas en nuestra plantación ecológica y los resultados fueron favorables, obteniendo una mejor productividad. Estamos convencidos de que podemos mejorar, uno de nuestros planes es trabajar a largo plazo en este proyecto para obtener una gestión agrícola sostenible y medioambiental”, continúa el productor. “Sabemos que las restricciones para las exportaciones cada vez son más y tenemos la convicción de ir un paso por delante, prever una prohibición total de pesticidas”, concluye.
Más información:Daniel Gudiño
Sicar Farms
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