Por culpa de las granizadas que ha sufrido Países Bajos, los precios han aumentado, algo que se nota sobre todo en el mercado de los pepinos. "El mercado diario disminuyó un poco la semana pasada, pero creo que esta caída durará poco tiempo", opina René Welles.
Aumentan los precios
El día después de que el granizo destruyera más de 30 hectáreas de pepinos en Brabante, los precios aumentaron. "Al día siguiente, aumentaron todavía más. Los contratos seguían en pie y había que entregar los pepinos. Hay mucha demanda y poca oferta, por lo que el mecanismo del mercado comienza a funcionar", explica René Welles. "Todo el mundo tiene cierto porcentaje por contrato. Casi todo lo que sufrió daños por el granizo acababa de plantarse o estaba comenzando a producir".
Por supuesto, solo se puede hacer conjeturas sobre cómo serían los precios si no hubiera granizado, pero la temporada no ha sido muy buena hasta el momento. "Especialmente las plantas tempranas han producido menos de lo que esperábamos. Cuanto más tardías, mejor ha sido la producción, que, a nivel técnico, ha sido muy difícil. Los productores se han puesto a prueba hasta el límite, y casi todos van por detrás en volumen de producción".
Buenos precios
Los precios fueron buenos hasta el penúltimo día. El miércoles pasado, los precios cayeron entre 19 y 20 céntimos. "Hemos estado cosechando más. Todos los invernaderos están en plena producción, y los precios minoristas tal vez hayan sido demasiado caros, lo que ha hecho estancarse las ventas. Sin embargo, creo que esta caída durará poco tiempo. Las condiciones meteorológicas están mejorando, de modo que el consumo y la demanda aumentarán. Lo vimos hace dos semanas; por ejemplo, se preveían 30 °C para el fin de semana y la demanda aumentó considerablemente". Se acerca la rotación de cultivos. "Comenzarán con la rotación en el oeste esta semana, y en el sur la semana siguiente. La oferta apenas será suficiente y, si la demanda aumenta un poco, los precios volverán a su nivel normal. No irá tan mal el resto del año".
Cultivo de otoño a la inversa
Los productores también sufren precios bajos para sus tomates, así que sería una buena opción producir pepinos para terminar la temporada, como una especie de cultivo de otoño a la inversa. El primer productor ya se ha decidido. "Solo sabré cuántos tomates y pepinos habrá después de que los haya plantado. Sin embargo, el mercado pide pepinos y hay que cubrir sus demandas. Conseguir pepinos para el resto de la temporada no resulta factible; habría que aumentar el precio de todos los pepinos".
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