Según Donati, hay que encontrar pronto una solución. "Por ejemplo, el producto dañado por el granizo y los desechos hay que dejarlos en los campos para que actúen como biofertilizante. Desafortunadamente, los productores solemos cosecharlo todo y gastamos dinero en ello aunque no recibamos nada a cambio. Además, a finales de año, compramos fertilizantes ecológicos. No estamos siendo muy inteligentes".
"El mercado es como un reloj de arena: los productores y los consumidores están a ambos lados, mientras que los compradores al por menor –que son pocos y están bien organizados– están en el medio. No podemos pasar todos por el medio, tenemos que organizarnos para reducir y optimizar nuestros números".
"Tenemos que hacer algo pronto, de lo contrario no podremos abordar la crisis y no habrá escapatoria".