Principales acuerdos
Los ciudadanos de la UE residentes en el Reino Unido y viceversa tendrán protegido su derecho a vivir, trabajar y estudiar, así como la garantía de que no habrá una "frontera dura" entre Irlanda del Norte y la República de Irlanda, manteniendo la "integridad constitucional y económica del Reino Unido". Además, se llegaría a un acuerdo financiero "justo para el contribuyente británico".
Con respecto a los derechos de los ciudadanos de la UE, según la BBC, May dijo que el acuerdo garantizaría los derechos de los tres millones de ciudadanos de la UE que residen en el Reino Unido.
Sus derechos serían "consagrados por las leyes del Reino Unido y hechos respetar por los tribunales británicos".
Los derechos de los ciudadanos del Reino Unido residentes en la UE también se mantendrán intactos y los trámites administrativos para los afectados serán "baratos y sencillos", añadió Juncker.
El Reino Unido, cuya salida de la UE está programada en marzo de 2019, ha mostrado su interés en abrir conversaciones sobre un nuevo tratado de libre comercio lo antes posible.
La UE solo accedería a su debate cuando se hubiera progresado lo suficiente en los "términos de la separación" –el "acuerdo de separación", los derechos de los ciudadanos expatriados y la frontera con Irlanda del Norte–, que, hasta el momento, han sido el sujeto de las negociaciones. Ha habido mucha presión para intentar aclarar el tema de la frontera con Irlanda del Norte antes de la reunión de los líderes de la UE esta semana.
Irlanda/Irlanda del Norte
También se informa de que "el Reino Unido se ceñirá plenamente a las reglas del mercado interno y la unión aduanera que, ahora o en el futuro, respalden la cooperación Norte-Sur, la economía de toda la isla y la protección del Acuerdo de 1998".