La temporada de kiwi verde está en pleno apogeo y los operadores están ocupados todos los días, intentando obtener precios justos para todos los tipos de calidad. Los tamaños grandes se venden a buen precio, mientras que los más pequeños alcanzan precios por debajo de las expectativas. Además, el producto de Grecia está haciendo la competencia. Las expectativas para la segunda parte de la campaña son buenas, especialmente porque los volúmenes son un 20% más bajos que el año pasado y hasta un 40% más bajos que el promedio de los últimos años.
Un operador privado que comercializa el 90% de su producción en el exterior informa de que "la demanda no es muy fuerte después de Navidad y Año Nuevo. Es la misma historia de siempre: los tamaños grandes se venden bien, mientras que el resto no. Sin embargo, hay muchos tamaños pequeños debido a las altas temperaturas y la sequía".
"Al negociar con un cliente de Canadá, consideré el transporte y la calidad del producto y propuse un precio de 1,50€/kg. No es excepcional, pero nos daría un margen. Ahora al cliente le gustaría pagar 20 céntimos menos y la cantidad en discusión es importante. ¿Qué deberíamos hacer? Hay muchos factores a tener en cuenta, pero por supuesto tendré que llegar a un acuerdo con el cliente".
En los mercados de Europa del Este o en los Balcanes, que no requieren alta calidad en general, los productos griegos son más competitivos en cuanto a los precios. Sin embargo, la calidad no es siquiera comparable.
"Afortunadamente, no habrá problemas de almacenamiento. La calidad es buena, los niveles potenciales de Brix son buenos y la fruta se almacena sin problemas. Sólo necesitamos encontrar mejores soluciones para nuestros tamaños más pequeños".