Los envíos destruidos se encontraban en tránsito por territorio francés a otros países europeos.
Las ventas de frutas y hortalizas españolas en Francia caen a niveles mínimos durante los meses de verano y están siendo casi totalmente desplazadas de este mercado por la competencia de Marruecos y Holanda.
Para FEPEX, el hundimiento de los mercados, y las tensiones que está provocando entre los productores comunitarios, es consecuencia de la ineficacia reiterada de las medidas de gestión de crisis adoptadas por la Comisión Europea y de la falta de una respuesta comunitaria eficaz imponiendo el respeto del derecho al libre tránsito después de la destrucción de otro envío el pasado 12 de julio.