Actualmente, en el Perú se cultivan 342 mil hectáreas de productos orgánicos de los 37,2 millones que se cultivan en el mundo y genera 4,827 puestos de trabajo, así lo indicó el Dr. Jorge Jave, director de la Subdirección de Producción Orgánica del SENASA.
En ese sentido, el especialista señaló el enorme potencial de la producción orgánica en el Perú, siendo la quinua, castaña, cacao y el banano orgánico los que tendrían las mejores expectativas de crecimiento.
Asimismo, Jave sostuvo que mejorar las prácticas, procesos, normas y certificaciones para las áreas cultivadas de productos orgánicos mejoraría la imagen, precio y calidad de los diferentes productos.
Del mismo modo, el especialista resaltó a los departamentos de Huancavelica y Moquegua como potenciales para desarrollar una agricultura eficiente, debido a sus propiedades de suelo y su posibilidad de aumento en tierras de cultivo.
Razones para su desarrollo de los cultivos orgánicos
Para Jorge Jave, el crecimiento sostenido de los cultivos orgánicos responde a diferentes motivaciones sociales y ambientales como: la crisis atmosférica, degradación alarmante de los suelos, escasez de agua, aumento dramático de las enfermedades virales; entre otros.
Otro de los motivos es, según el especialista del SENASA, que existe un aumento en comercio de los alimentos, debido al incremento de la población mundial en más de 12% por año.
Asimismo, Jave atribuyó que parte de este aumento se debe también al apoyo de los países desarrollados y sus grandes gremios empresariales que han contribuido “enormemente” a que el mercado de los productos orgánicos se duplique y hasta triplique desde el año 2000.
Rol del Estado
En ese sentido, Jave indicó que para mejorar la oferta de productos orgánicos peruanos, se debe poner énfasis en la calidad de los cultivos en las diferentes regiones e incrementar su producción de manera sostenida.
Para lograrlo, el especialista señaló que las diferentes instituciones del Estado, relacionadas con el agro y la innovación agrícola (MINAG, INIA, SENASA), tienen que ser responsables en sus respectivas direcciones de competitividad, facilitando a los productores acceso al conocimiento e información de las nuevas tendencias en prácticas agrícolas.
Finalmente, el funcionario del SENASA precisó que el gobierno, por ser el ente rector y normativo, debería cumplir y priorizar la fiscalización y control de los productos destinados a la exportación, para que de esta manera la imagen de marca país se desarrolle de la mano con el incremento de los envíos.
Fuente: AgrariaPe