Argentina: Tomate para industria
Como lo anunciáramos en ediciones anteriores de nuestro Suplemento Verde, en el tomate para industria dos parámetros marcan el rumbo: el riego por goteo y la cosecha mecánica. El sector está buscando la optimización en todos sus niveles para arribar a un alto rendimiento por hectárea, que es la manera de luchar contra los altos costos argentinos actuales.
Esta semana salimos a recorrer algunas de las numerosas fincas donde se han colocado equipos de riego por goteo en esta temporada. La lista, entre los que se pudo averiguar, incluye a 27 productores, sorprendiendo la cantidad de los mismos. Julián López, Andrés Castillo, Alberto Figueroa, Eduardo de la Rosa, Oscar Galdeano, Miguel Martín, Juan Carlos Linares, Antonio García, Juan Marrelli, Ricardo Torres, Roberto Ferrer y Armando Vives son algunos de los que hoy riegan y fertilizan sus plantitas con estos sistemas. Veamos sus comentarios.
Julián López instaló un equipo nuevo de goteo para tomate en aproximadamente 7 hectáreas, ubicadas en Vidart, entre calles 5 y 6, Pocito. Allí tiene un lote transplantado el 1 de setiembre, de Star 9063 para una conservera local. Hizo un reservorio de 2,5 millones de litros, con cierre perimetral y membrana plástica. Acumula el agua de los turnos, y tiene un pozo secundario que no usa. Además agregó tendido eléctrico hasta la pieza donde está la central del equipo. A él le diseñaron un equipo que tiene mangueras enterradas a 5 centímetros, con goteros de 1 litro, separados cada 30 centímetros, y a 1,40 metros entre líneas. Todo está automatizado, todo lo mecanizó.
En otra finca, sobre calle 7 casi Mendoza, donde López posee un lote de tomate HMX 3861, de 51 días, nos comentó "ahora puedo trabajar con más tranquilidad, estar en más fincas, mientras se riega. Hemos capacitado a un operario por finca y es el responsable del riego. Yo estaba antes, con riego común, sacando entre 70 y 75.000 kilos por hectárea, ahora pienso llegar a más de 100.000. El equipo se paga sólo, sacando mayores rindes. Estimo un gasto de entre 30.000 y 35.000 kilos por hectárea, porque el pozo en esta finca ya estaba funcionando".
Fuente: Diariodecuyo