España: Un tren transportará frutas y hortalizas de Silla a Londres a partir de mañana
La empresa Inexphill Logística Internacional inicia el próximo martes día 15 un servicio de transporte directo de frutas y hortalizas por ferrocarril desde la estación valenciana de Silla hasta Londres. Cada convoy hará un viaje semanal y realizará el trayecto en cada sentido en 53 horas.
Joaquín Guillamón Parra, responsable de Inesphill para el control técnico y la calidad de los envíos, ha indicado que esta iniciativa supone en la práctica «el embrión del futuro corredor mediterráneo», por lo que supone una meritoria apuesta cuando tanto se está hablando de la conveniencia de que se construya esta infraestructura. Con la puesta en marcha del servicio que ahora se inicia, utilizando la red ferroviaria convencional, se aspira a demostrar que el tren es ya una alternativa viable si las cosas se programan con eficiencia, por lo que tiene mayor sentido la aspiración de disponer del corredor para dar cauce a un mayor tráfico de mercancías.
De hecho, en la actualidad, un camión tarda algo más de dos días en llegar desde Valencia a Inglaterra, por lo que el tiempo del trayecto previsto para el convoy ferroviario de Inesphill, 53 horas, se sitúa más o menos en un tiempo similar. Sin embargo hay sustanciales diferencias en los costes, pues el tren es más barato.
La citada empresa tiene previsto centralizar en Silla la recepción de mercancías tanto de la Comunitat Valenciana como de Murcia y Almería. Desde sus puntos de origen, los productos llegarán a la estación valenciana en contenedores frigoríficos sobre camiones, para cargarse en el tren.
Cada jornada parten hacia el resto de Europa más de 2.000 camiones tráiler con cítricos y toda clase de productos hortofrutícolas. Un ingente volumen de artículos perecederos para los resulta vital contar con medios de exportación rápidos, eficaces y económicos, tres condiciones que se supone resolverá definitivamernte el futuro corredor ferroviario. El camión es ahora mismo el sistema más rápido y flexible, pero crecen sin parar sus costes y las restricciones de todo tipo para transitar por Europa, por lo que urgen alternativas viables. Una de ellas será -ya lo es en parte- la vía marítima, con modernos y rápidos barcos frigoríficos, pero otra será necesariamente el tren y la firma Inesphill aspira a demostrarlo desde el próximo martes.
De esta forma 'resucitan' dos medios de transporte de mercancías que tuvieron sus épocas doradas en la exportación naranjera, para perder peso después, conforme se iba abriendo camino la alternativa más eficiente del camión.
Las primeras exportaciones naranjeras se hacían en pequeños barcos a vela de navegación de cabotaje, en rutas próximas a la costa. En algunos casos partían de playas donde aún no había puertos, como en Burriana, y se cargaban en barcas de trasbordo que acarreaban las cajas desde la misma orilla de la arena. Los buques iban sobre todo a puertos del sur de Francia, hasta que se fue implantando el vapor, y luego el fuel, y eso permitió llegar más lejos, concretamente a las Islas Británicas, norte de Alemania, Escandinavia.
Luego le llegó el momento al tren. Fue a principios de los años cincuenta y de la mano de la compañía Transfesa, que monopolizaba el servicio. Pero a primeros de los años setenta, la disponibilidad de una autopista que llegaba desde Valencia hasta la frontera francesa, y allí enlazaba con las redes galas y del resto de Europa, permitió el auge del camión que dura hasta nuestros días. Ahora parece que vuelven a tener protagonismo los trenes y los barcos modernos.
Fuente: Lasprovincias