Entre otros objetivos, el proyecto propone fortalecer las medidas de protección a la salud de los consumidores y asegurar la sanidad agropecuaria.
Ayer, el ministro de Agricultura, Juan Camilo Restrepo, puso a consideración del Congreso de la República un proyecto de Ley que crea el Sistema Nacional de Identificación, Información y Trazabilidad Animal (Sinigán).
"Con esta se busca mejorar la sanidad e inocuidad de los alimentos, prevenir prácticas ilegales en el comercio, mejorar la información disponible para el consumidor y responder a los requerimientos del comercio internacional", dijo el Ministro.
"La Trazabilidad se entiende como el proceso mediante el cual se puede identificar a un animal o grupo de animales, para que su identificación e información pueda ser integrada a todos los eslabones de la cadena alimentaria hasta llegar al consumidor", explicó.
El Sistema -dice el proyecto de Ley- estará a cargo del Ministerio de Agricultura, tendrá como fuente de financiación las tasas que se establezcan a cargo de los agentes que lo integren, las partidas específicas del presupuesto nacional, las donaciones nacionales e internacionales, los recursos de los fondos parafiscales y los de crédito, entre otros.
Sin embargo, se estima que la Ley será demandada en pocos días, pues las fuentes de financiación no satisfacen a los ganaderos de la Costa, quienes consideran que, de sancionarse la Ley, se incrementarán los costos de las guías de movilización de ganados, pese a que deben seguir pagando la cuota parafiscal (al sacrificio) con destino al Fondo Nacional del Ganado (FNG). La apreciación la dio William Botero, gerente de la feria de ganados Subastar (Montería); sin embargo, el empresario destacó que ni él, ni los ganaderos de la Costa están en contra del proceso de trazabilidad, sino por la forma de financiar el programa. Por su parte, el Gobierno, en su exposición de motivos destaca que el proyecto de Ley beneficia a los productores, industriales y consumidores.
Para los primeros, posibilita el acceso a los mercados nacionales e internacionales con mayores exigencias y mejores oportunidades de rentabilidad, mientras que para los industriales se genera valor agregado a los productos que tienen trazabilidad. Para los consumidores -argumentó el Ministro de Agricultura- es una herramienta para la protección de la salud, mientras que para el Gobierno, entre otras razones, sirve de herramienta de apoyo para la formulación y ejecución de las políticas y programas de salud animal y de fomento.