Chile: Nuevo limonero chileno sobresale en productividad
Benjamín García Huidobro ha estado ligado al mundo corralero toda su vida. Médico veterinario, se ha hecho conocido como un gran criador de caballos chilenos. Fue, incluso, quien dirigió el criadero Santa Isabel en uno de los períodos más exitosos. Ese ojo que posee para hacer las selecciones y apostar "en verde" por uno u otro potrillo, hoy lo tiene como uno de los jurados más importantes del país en las exposiciones que organizan los criadores nacionales.
Ese don de la observación le sirvió también para descubrir en su campo, en Mallarauco, plantado con limones, una mutación que tras algunos años y estudios especializados, ya es reconocida como una nueva variedad, más productiva y más precoz que las establecidas, y que ahora se reproduce e ingresa masivamente al mercado.
La historia parte hace poco más de 12 años, cuando entre el huerto de limoneros de la variedad Eureka García Huidobro se encontró con que uno de los árboles era distinto.
Algunos años antes había comprado en el Huerto California, cerca de 10 mil plantas para su apuesta por cítricos en su fundo El Principal.
Se dedicó a observar lo que pasaba. Y vio que ese árbol entregaba la fruta antes y además muchos más kilos. Entonces paró las antenas y observó que lo que tenía no era una quimera, como se conoce cuando es sólo una rama la que tiene características especiales, producto del injerto. Si ella es reproducida lo más probable es que comience muy bien, pero al tiempo pierda las cualidades. Pero en este caso era el limonero entero.
Después de seguirlo un par de temporadas, García Huidobro lo conversó con Francisco Gardiazábal, profesor de la Universidad Católica de Valparaíso, uno de los más reconocidos especialistas en fruticultura del país. Y comenzaron a hacer estudios. Vieron que el árbol era diferente como productor de limones, con menos chupones y menos espinas. Lo reprodujeron y lo llevaron al huerto y comprobaron sus condiciones. De ahí pasó a manos de la Universidad de Chile que lo siguió probando por casi 10 años después de que fue descubierto.
"Creo que fue un hallazgo fantástico. Lo más importante es que se sale un poco de lo normal en cuanto a que el limón chileno no se produce en verano, en cambio esta variedad presenta el 40% de su producción en verano. Eso tiene una ventaja. Cuando las exportaciones están malas, tiene la salvedad de aparecer con producto en verano para el mercado interno, y hay que recordar que este año, por ejemplo, el kilo costó 800 pesos", señala García Huidobro. Tiempo atrás entregó la variedad y ahora sólo le quedan las plantas madres que conserva en un huerto en su casa.
Lo que viene ahora para Benjamín Eureka es su entrada masiva al mercado. La propiedad es de Andes New Varieties Administration, ANA, la que ahora ampliará la entrega de sublicencias a los viveros que tengan interés. "Ya hay cinco de ellos que lo han manifestado y estamos en proceso de concreción de las autorizaciones correspondientes", señala la ingeniera agrónoma Verena Müller, jefa de producto de Cítricos de ANA Chile.
Mayor producción
Fueron tres las mutaciones halladas en el Lote A de la Hijuela San Miguel del fundo El Principal. Todas destacaban por su mayor carga, calibre y reflorescencia.
"Se asume que fueron producto de la mutación de la yema injertada, dado que las características distintivas se manifestaban en el árbol completo. A partir de 1999 se comenzó a hacer seguimiento más formal a los árboles originales y también a su progenie -plantada en 1997 en el mismo predio- por parte del profesor Francisco Gardiazábal y su equipo", señala Verena Müller.
Pero una de las tres mutaciones sobresalió sobre las otras por su consistencia en la precocidad para entrar en producción, productividad, calibre y distribución de cosecha.
En 2001 Andes New Varieties Association se hizo cargo del desarrollo de la variedad, la inscripción en el registro de variedades protegidas del SAG y de su evaluación. En los siguientes años los estudios fueron encargados a la Facultad de Agronomía de la Universidad de Chile y liderados por el Dr. Thomas Fichet, quien como representante de una entidad independiente, comprueba las características fenológicas y productivas que distinguen a Benjamín Andes cv.
Según sus propietarios, la variedad chilena presenta una precocidad y productividad elevadas en comparación con otras disponibles en el mercado.
La producción anual es superior a otros clones mejorados de la variedad Eureka, incrementándose con la edad de las plantas.
La elevada productividad de sus árboles permite mantener un vigor más controlado, logrando mejorar la optimización del predio y un aumento en el rendimiento por superficie.
Junto con lo anterior, ha mostrado una mejor distribución de cosechas durante el año, permitiendo disponer de mayor cantidad de fruta en el verano, sin afectar su potencial productivo de invierno, coincidiendo con los precios más elevados de esta fruta.
Protegida
Se encuentra inscrita en el Registro de Variedades Protegidas del SAG amparada por la Resol 49/06. Obtiene la protección luego de haber superado numerosas pruebas por varios años para demostrar su precocidad, productividad, distribución de cosecha y calibre, diferenciadores de un Eureka convencional. Está protegida por la Ley 19.342, por lo que no puede ser reproducida sin autorización expresa y por escrito de Andes New Varieties Administration, titular de los derechos. Se trabaja en la obtención de su "fingerprint" con asesoría de especialistas españoles, para facilitar la identificación de las plantas y hacer el monitoreo de las plantaciones.
¿Cómo es?
El árbol es semivigoroso, algo más compacto que Eureka, con algunas espinas en las ramas de mayor vigor que desaparecen al entrar en producción. En general, su hábito de crecimiento es similar a Eureka, pero dada su precocidad en entrar en producción, tiende a ser menos vigoroso que Eureka. Los frutos son de buen calibre, la pulpa tiene un elevado contenido en jugo, acidez normal y escaso número de semillas. El fruto es similar a otros de Eureka, aunque de un calibre algo superior. No presenta "camotes", como se denomina a los frutos de un tamaño y formas atípicas.
Autor: Arnaldo Guerra Martínez.
Fuente: El Mercurio de Santiago