Todavía quedan cítricos, pero en cantidades mucho menores de lo habitual, lo que significa que, por supuesto, los precios son más altos.
Muchos agricultores de cítricos de Plaquemines afirman que han perdido alrededor del 75% de su cultivo de Satsumas y sobre un 90 % de sus naranjas Navel. Además, está previsto que la temporada finalice más pronto este año. Por ejemplo, las Satsumas, que normalmente se pueden adquirir hasta Navidad, probablemente se acaben de aquí un par de semanas.
Los cultivos no son lo único que han perdido los agricultores. También han perdido material, instalaciones de la cadena de distribución y, en casos extremos, sus casas.
Alan Vaughn, agente del AgCenter de Luisiana que trabaja en la industria citrícola de Plaquemines, teme que incluso los árboles que se han recuperado no produzcan demasiada fruta el próximo año.
La mayoría de las perdidas de cítricos en Plaquemines han sido provocadas por los prolongados e intensos vientos y lluvias de la tormenta que tiraron las frutas de los árboles.
En general, cayeron más naranjas Navel que Satsumas, ya que las primeras tienen mayor peso.
El economista del AgCenter de Luisiana, Kurt Guidry, dice que además hay "una seria amenaza de que mueran árboles debido al prolongado período de inundaciones", en particular en el lado este de Plaquemines.
Fuente: nola.com (en inglés)