Las tres partidas contenían más malatión del permitido, un potente insecticida organofosforado. Dos de ellas han duplicado los LMR aceptados en la UE para este producto químico, al contener 0,4 y 0,038 miligramos por kilogramo muestreado de esta sustancia, de la que se permite en pimiento un máximo de 0,02. La tercera, sin embargo, ha sobrepasado, con creces, los LMR al encontrarse 0,288 miligramos por kilo muestreado de malatión, lo que supone 14,4 veces más de lo permitido.
En los tres casos de los pimientos, ha sido Bulgaria el país que ha recibido las partidas y que, tras llevar a cabo los análisis pertinentes, ha obtenido esos resultados. Las dos partidas que duplicaban la cantidad máxima permitida de malatión en pimiento se analizaron en laboratorios búlgaros durante la jornada del pasado 1 de noviembre, mientras que la tercera partida, la que multiplica casi por 15 los LMR de esta sustancia, se analizó el pasado domingo, día 3 de noviembre, donde se decidió proceder a la destrucción total de la mercancía.
La entrada de pimiento procedente de Turquía a la Unión Europea, a través normalmente de Bulgaria, superando los límites máximos de residuos no es una novedad, más bien es una constante. Aparte de bloquear las partidas, la UE debería plantearse exigir cambios a la hora de producir en Turquía para aceptar la importación de frutas y hortalizas de este país.
Fuente: abc.es