Las autoridades dijeron que al menos 2 millones de personas en 41 provincias se habían visto afectadas por el desastre que acaeció el viernes y al menos 23.000 hogares han sido dañados o destruidos. Grandes zonas a lo largo de la costa se han transformado en montones de escombros retorcidos que cortan carreteras y mantienen atrapados cuerpos en descomposición. Los barcos fueron lanzados a tierra firme, los coches y los camiones fueron barridos hacia el mar y los puentes y los puertos fueron arrastrados por las olas.
El tifón arrasó los cultivos de palmeras, bananos y cocoteros y trajo consigo ríos de agua que anegaron las carreteras.
El Departmento de Agricultura filipino informa de una devastación total de los cultivos y plantas en Cebú Norte, que incluye Borbón, Tabogon, Bogo City, Medellín, San Remigio, Daanbantayan y toda la isla de Bantayan.Según el departamento, el 85 por ciento de todos los mangos con fruto fueron arrancados de raíz y no hay posibilidad de recuperación.
No obstante, Del Monte informa de que su plantación de piñas e instalaciones manufactureras en Mindanao se han salvado de la furia del tifón.