Aunque los mercados de transformación y sidra son buenas alternativas para los productores de manzanas cuando existen problemas de calidad, el principal mercado continúa siendo el de los productos frescos. De hecho, para muchos productores de la costa este de los Estados Unidos, el aumento de los niveles de producción en el país les ha permitido trabajar más en el mercado de productos frescos y en los cada vez más diversos destinos de exportación.
“Si nos fijamos en la producción total de manzanas en los Estados Unidos, no cabe duda de que tenemos que incrementar nuestras exportaciones en mucha cantidad para mantener buenos niveles de oferta y demanda”, asegura Jim Allen, presidente de la Asociación de la Manzana de Nueva York. “Si no incrementamos las exportaciones y tratamos de venderlo todo en los Estados Unidos, el mercado se quedará estancado mucho tiempo”. Debido a que los mercados de transformación y sidra no son alternativas viables para grandes volúmenes de fruta, las exportaciones son el modo de garantizar que lo que se cultiva a nivel nacional no se convierta en exceso de producto.
“Contamos con una base de transformación, pero no es el mercado más próspero”, señala Allen. “La fuerte industria de la sidra está emergiendo y creciendo, pero no sé de nadie que esté plantando huertos para la industria de la sidra”. Del mismo modo, los productores de Ontario, Canadá, también siguen dependiendo fuertemente del mercado en de los productos frescos.
“No hay muchos dólares para los productores en la transformación”, explica Charles Stevens, presidente de Productores de Manzana de Ontario. “La transformación consiste en hacer zumo de manzana, pero los volúmenes que requiere no son los que solía”. De hecho, la mayoría de la industria transformadora ha salido de Ontario, a lugares en los que los costes son menores.
“En Ontario se procesan muy pocas manzanas”, añade Stevens. “Los productores están optando por el producto fresco tanto como pueden”.