Claudio Celco, gerente de exportación de Rio Doce, explica que "la demanda de mangos Palmer está creciendo en Europa porque los consumidores están advirtiendo que no tiene fibras, es más dulce, pero no más caro. Es una cuestión de cambio de preferencias. Por su parte, el mercado brasileño prefiere el Tommy, porque es más barato, seguido del Palmer y el Haden".
Portugal y España se encuentran entre los países que prefieren los mangos Palmer, que importan sobre todo por aire. "Solo Portugal compra entre 80 y 100 palés de mangos semanales. Estos mangos, al contrario de los enviados por barco, se exportan cuando están listos para consumir y tienen un sabor mucho mejor", afirma Claudio.
Las plantaciones de mango en Brasil continúan expandiéndose, mientras las condiciones laborales mejoran significativamente año tras años. Claudio explica que "para los brasileños cada vez es más caro exportar, en comparación con los exportadores caribeños y sudamericanos, y encontrar mano de obra también es una tarea complicada".
La nueva temporada brasileña para la fruta comenzará en noviembre y Rio Doce prevé tener higos, guayabas y mangos. Según Claudio, "no será hasta entonces cuando veremos cómo se desarrollará la nueva situación de mercado creada por el veto Ruso".
En el mercado del mango, Brasil se enfrenta a algunos competidores fuertes, incluido Perú, que, pese a no tener una temporada totalmente coincidente, no deja de crecer año tras año. "Brasil, en todo caso, es mucho más competitivo en términos de envíos aéreos debido a las tarifas más baratas para volar a Europa".
Rio Doce fue creada en 2005 por un grupo de personas con 23 años de experiencia en el negocio de la exportación de fruta. Comenzó siendo un exportador de higos y, desde sus comienzos, se ha esforzado por encontrar las frutas más adecuadas con las que trabajar y por ofrecer el mejor servicio posible a sus clientes.