Los soldados de la unidad de élite Duvdevan han arrestado a tres sospechosos palestinos. La mujer y las cuatro hijas de Ben-Zion están convencidas de que los motivos eran nacionalistas: Avi Ben-Zion fue asesinado porque era judío. “Si no, se habrían llevado su coche sin más”. Su familia ha decidido donar sus órganos. Avi Ben-Zion tenía 63 años.
Avi Ben-Zion llevaba trabajando como productor de pimientos desde 1976 en el valle del Jordán, donde los palestinos se han ido asentando a lo largo de los años. Cultivaba alrededor de 60 hectáreas de pimientos y unas pocas hectáreas de uva. Además, la compañía vendía tomates cherry y frutas exóticas. Su mujer Niva trabajaba en las ventas de higos y gestionaba el negocio de los pimientos. Justo el mes pasado la visitamos en Israel.
David Elhayani, del Consejo Regional del Valle del Jordán, le recuerda como “un gran hombre, humilde, modesto y todo un agricultor”. Según los vecinos, Ben-Zion trabajaba con cientos de trabajadores israelíes y palestinos y a todos ellos los trataba con igualdad y respeto.
Pieter de Ruiter, de 4 Fruit Company, conocía a Avi desde 2007 y había forjado un vínculo especial con él. “Era un hombre muy simpático. Es increíble que le haya pasado esto a él. Aunque sus colegas del valle del Jordán iban armados, él eligió conscientemente no hacerlo porque pensaba que eso irradiaba agresividad. Mi mujer también es judía, así que en seguida conectamos. Yo no tenía permitido ir a Israel sin mi mujer y ellos siempre nos visitaban juntos también cuando estaban en los Países Bajos. Los cuatro hemos ido de viaje por Jordania y Capodistria. Cuando había un pequeño conflicto en los negocios, trataba inmediatamente de encontrar una solución de forma tranquila y amistosa. Cuando sus hijas estaban sirviendo en el ejército y no tenían buena comida, él conducía 200 kilómetros para llevarles comida, era ese tipo de hombre”.