“El problema es que la UE ha aprobado una ampliación del contingente de ajo que puede entrar en el mercado europeo, lo que significa que va a llegar más cultivo de China, con quien es imposible competir en costes de producción porque aquí se respetan, como debe ser, normativas laborales y sanitarias que allí no tienen cabida”, critica con vehemencia la representante de la Mesa Nacional del Ajo.
Una situación que además se ve agravada por el contrabando, ya que según denuncia la asociación agraria, entra mucho ajo a Europa que escapa a los controles. Y pone un ejemplo. “La cebolla tiene un arancel más bajo que el ajo, así que enmascaran sus envíos con una primera parte de cebolla detrás de la que esconden el ajo”, lamenta.
Estas circunstancias están colocando a los productores andaluces en una situación límite. “Muchos agricultores se están viendo obligados a vender en el campo en estos momentos y a falta de dos meses para la fecha de recolección por su falta de liquidez”, asegura Quintero.
Los productores andaluces reclaman “una mayor implicación en la defensa del sector por parte del Ministerio de Agricultura”, explica la representante de COAG. “Se ha reformado la PAC y se han olvidado de la partida para la regulación de los mercados. Ya que estamos marginados de las ayudas directas de la Política Agraria Común, exigimos que regulen los mercados para que se consuma el ajo español antes que el extranjero”, afirma.
“Queremos que se garanticen unos precios mínimos para evitar vender a pérdidas y que rondarían 1,20 euros por kilo. Y pedimos también que se realicen campañas de promoción que combatan el descenso del consumo en el mercado interno que ha provocado la crisis por no ser el ajo un producto de primera necesidad”, continúa Quintero.
Fuente: Elmundo.es