Israel prevé una escasez de tomates durante las vacaciones de Yamim Noraim por culpa de un virus que ha destrozado las cosechas y porque el Gobierno decidió comprar productos agrícolas más baratos de Jordania, Gaza y la Autoridad Nacional Palestina. Por lo tanto, ahora el Gobierno ha decidido importar toneladas de tomates de Turquía sin aranceles para atenuar esta escasez.
La cadena de supermercados Supersal ya ha comenzado a importar 250 toneladas semanales de tomates de Turquía, y la cadena Rami Levy está importando 160 toneladas semanales. Sin embargo, la cadena de supermercados Victoria no espera una oferta estable por parte de sus proveedores directos.
Cabe destacar que los tomates de Turquía no son baratos: cuestan entre 5 y 7 séqueles (entre 1,17 y 1,65 €) el kilo. Su precio en los mercados mayoristas es de entre 5,5 y 6 séqueles (entre 1,29 y 1,40 €) el kilo.
Estos precios relativamente altos en los mercados mayoristas se deben a la escasez de tomates locales provocada por un virus que ha reducido la producción a la mitad.
Los productores israelíes culpan del brote vírico a los tomates baratos importados desde Jordania. El Gobierno creó una iniciativa para importar productos agrícolas de Jordania, Cisjordania y Gaza, que son más baratos, para reducir el coste general de la vida. Sin embargo, esta política ha acabado perjudicando a los israelíes.
Las condiciones meteorológicas calurosas también se consideran un factor que ha contribuido a la mala cosecha de tomates.
Fuente: ynetnews.com