"Los gastos adicionales deben transmitirse al siguiente eslabón"

Con su llamativo camión, Ronny Willems, de Ronnytrans, conduce desde Bélgica hasta España o Portugal y después vuelve a Bélgica o a Países Bajos. En 1996, decidió fundar su propia empresa, y no se arrepiente. "Mis clientes saben que pueden contar conmigo", afirma. "De eso se trata en el sector del transporte".

La mayoría de sus fieles clientes pertenecen al sector de los productos agrícolas frescos. "Transportamos frutas y hortalizas frescas y congeladas. En general, mis clientes del sector 'fresco' son de Sint-Katelijne-Waver, en Bélgica, y los del sector 'congelado' tienen empresas por toda Flandes Occidental, que no solo envían sus productos al sur de Europa, sino también a Bélgica".

Tuvo muy claro que solamente quería llevar un camión. "Para mí, no tiene más que beneficios; es un trabajo muy agradable, sobre todo por la libertad que permite. Lo planifico todo yo mismo, no tengo que preocuparme por el personal y, si recibo un pedido que no puedo hacer yo mismo, lo delego. Así de fácil".

Willems se da cuenta de que los costes del sector logístico cada vez son más elevados. "Nos damos cuenta todos los años. Por ejemplo, este año Bélgica ha implantado un impuesto sobre el kilometraje, que está dando problemas a algunos de mis compañeros de profesión porque sus clientes no entienden el gasto extra. Para mí es muy sencillo: los costes se transmiten al siguiente eslabón de la cadena. Si no, es como cavar mi propia tumba. Por suerte, mis clientes lo comprenden. Tenemos una buena relación desde hace años y tenemos confianza. Saben que siempre llego a tiempo y que todo va según lo planeado. Ronnytrans cumple lo que promete".